Como una estrella fugaz, Amy Winehouse brilló para enseguida apagarse para siempre. La joven que destacó con apenas dos discos publicados se unió al llamado “club de los 27” al morir intoxicada por el consumo de una gran cantidad de alcohol hace 10 años.
Fue aquel 23 de julio de 2011 y después de ingerir niveles peligrosos de alcohol, que su guardaespaldas la encontró sin vida en su habitación. La escena mostraba dos botellas de vodka junto a ella. La causa de la muerte: intoxicación por alcohol.
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Hoy, Amy Jade Winehouse cumpliría 38 años de edad pero en tan solo unos cuantos de carrera logró cautivar a cualquiera que la escuchara antes de su trágico pero no sorpresivo final. Aquí te contamos la historia de la última incorporación al “club de los 27”.
El comienzo
Nació un 14 de septiembre de 1983 en medio de una familia judía. La música estaba en sus venas, sus hermanos eran músicos de jazz y su abuela paterna era cantante. Parecía que su destino ya estaba escrito.
Con una gran admiración por su hermano Alex, quien era un amante de la música, tocando jazz y rock, Amy se animó a colgarse una guitarra a la edad de 15 años para componer sus primeras canciones.
Sus primeros contactos con un público fue al ser la vocalista principal de la National Youth Jazz Orchestra, donde fue escuchada por 19 Management para firmar su primer contrato. Con tan solo 20 años, el sello Island la contrató y el 20 de octubre de 2003 lanzó su primer álbum 'Frank' con un éxito menor al esperado. Amy, estaba a punto de ser escuchada.
El ascenso a la fama
Pasaron tres años y fue el 30 de octubre de 2006 cuando su carrera tomó el camino del éxito gracias a su segundo disco ‘Back to Black’ en donde Amy mostraba una faceta más cruda, con letras sinceras pero desgarradoras, mismas que eran provocadas por un mal momento para la artista ya que se encontraba viviendo el rompimiento con su pareja Blake Fielder-Civil.
Canciones como ‘Rehab’, ‘You Know I’m No Good’ o ‘Tears Dry on Their Own’ dejaban en claro que Amy ya era una realidad, recibiendo incontables elogios por parte del público y expertos musicales.
El comienzo del final
Con una vida de excesos cargando de años atrás, Amy Winehouse consumía drogas, siendo captada en varios momentos consumiendo crack, esto aunado a los problemas de depresión y de pérdida de peso provocados por la bulimia que padecía.
El matrimonio de Amy con Blake fue blanco de la prensa debido a los múltiples escándalos provocados por el consumo excesivo de drogas y agresiones físicas que existían entre ellos. En 2007, Amy canceló algunos conciertos argumentando cansancio y fatiga, meses después sería hospitalizada por una sobredosis de heroína, crack, cocaína, ketamina y alcohol.
Alcohol sobre el escenario
En mayo de 2008, Winehouse participó en el festival de Rock in Río III, en la ciudad de Lisboa. Después de media hora de retraso y aclamación de sus admiradores, la cantante, para sorpresa del público, subió al escenario totalmente borracha, tambaleándose y afónica.
El 18 de junio de 2011, Winehouse realizó en Belgrado, un concierto catalogado por sus propios admiradores como desastroso y escandaloso, e incluso se lo consideró “el peor concierto jamás visto”, al encontrarse en el escenario completamente ebria. La crítica fue tal, que la artista canceló el resto de las funciones, regresando a su hogar antes de lo previsto.
Su legado
La cantante ha sido destacada como gran influencia para varios artistas. Lady Gaga acreditó que ‘gracias a Winehouse las mujeres tienen un camino más fácil en la música pop en general’. Raphael Saadiq, Anthony Hamilton y John Legend dijeron: ‘Amy Winehouse fue producida por la gente que quería crear una comercialización golpe de Estado. El lado positivo es que al familiarizar al público con esta música desempeñó un papel introductorio para los demás. Revitalizó el género mediante la superación del aspecto vintage.’
DAG