Durante más de tres décadas no ha dejado de sonar su música y a siete años de haber regresado a los escenarios, Caifanes volvió a Guadalajara para demostrar por qué se mantiene vigente en el rock en español.
Saúl Hernández, Sabo Romo, Alfonso André y Diego Herrera hicieron vibrar anoche el escenario del Auditorio Telmex, que agotó localidades.
A las 21:15 horas se apagaron las luces y el sol llenó la pantalla con “Dioses ocultos”, con la que la gente empezó a cantar y las voces no callaron desde entonces; continuaron con “Viento” y “Nubes”.
“Es un placer estar aquí, es un honor regresar a Guadalajara, gracias por estar aquí después de tantos años”, expresó emocionado Saúl Hernández, para seguir con “Te estoy mirando”.
“En la vida hay que tener coraje, no hay que tener miedo, y al amor jamás hay que tenerle miedo”, dijo el líder de la banda antes de que se escuchara “Miedo” y “Debajo de tu piel”.
Un solo de batería de André fue la introducción de “Para que no digas que no pienso en ti”, seguida de “Nada”. “Cuando compuse esta canción, el país estaba muy mal, y sigue estando mal, cada sexenio es peor y este es uno de los peores de la historia; siempre dicen que ‘Aquí no pasa nada’”, recordó Hernández.
El setlist siguió con “Piedra”, que terminó a ritmo de banda.
“El verdadero cambio en este país está en nosotros, no un presidente... La pelea es dura, pero no imposible”, expuso Saúl, quien dedicó “Antes de que nos olviden” a Salomón, Francisco y Daniel, estudiantes de cine desaparecidos y asesinados en Guadalajara. Durante el tema, las imágenes de las recientes marchas clamando justicia se apoderaron del recinto y conmovieron a los presentes.
“Cuéntame tu vida”, “Detrás de ti” y “Ayer me dijo un ave” fueron cantadas a todo pulmón por los miles de fanáticos, que siguieron emocionados con “Mátenme porque me muero”, “Amanece”, “Metamorfeame”, “Aviéntame” y “Perdí mi ojo de venado”.
Saúl hizo una pausa y presentó a la banda, lo que anticipaba la despedida con “Aquí no es así”.
Dijeron adiós, pero miles de celulares iluminaron el recinto y ante los gritos la banda cedió y regresó con “Quisiera ser alcohol”, “No dejes que” y “La célula que explota”, esta última interpretada en su mayoría por el público, que después bailó con “La negra Tomasa”.
Amenazaron con irse, pero los jaliscienses no los dejaron y ante el clamor de “Afuera” volvieron para cumplir el tema, además de “Nos vamos juntos” y “Te lo pido por favor”, de Juan Gabriel, así como “De noche todos los gatos son pardos”.
Agradecidos por la entrega, regresaron una tercera vez para interpretar “Vamos a hacer un silencio”, en honor a las víctimas de los sismos de septiembre pasado, en la que dejaron de tocar unos segundos con el puño al aire, así cerró una noche de recuerdos, nostalgia y reflexión.
SRN