Antes de cumplir 20 años, Carlos Torres tenía otro plan de vida: quería estudiar medicina, pero cuando iba a dar el paso hacia la universidad por insistencia de su mamá hizo el casting para edición 12 de La Academia, y se quedó.
“La música la veía para obtener recursos, trabajaba de mariachi, no era algo que quería hacer toda mi vida, pero cuando sale lo de La Academia mi mamá me dijo ‘Hijo, ve a hacer el casting’, y lo hice más por darle el gusto”, recuerda el cantante nacido en Guadalajara en entrevista con MILENIO.
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De su paso por el reality show de TV Azteca, Torres - que quedó en tercer lugar durante la decimosegunda generación, apenas superado por la sinaloense Dalú y la hondureña Angie -, dice que lo ayudó a quitarse el miedo. También “me dio muchas bases, me dio una motivación”.
“A nuestra generación de La Academia le pegó la pandemia, nos truncó muchas cosas. ¡Íbamos a ser una de las primeras Academias que después de tantos años iba a hacer una gira!”, comenta el artista sobre el programa que celebró su final el 23 de febrero de 2020, semanas antes de que se decretara la cuarentena por el covid-19.
Pero con esta etapa superada, Carlos afirma que su carrera está “en un buen punto, vamos al 30 por ciento de lo que quiero seguir subiendo, de lo que es mi objetivo actualmente; me siento muy bien, siento que voy un paso pequeño a la vez, pero muy firme, componiendo canciones y vienen varias colaboraciones”.
Prueba de este momento de plenitud es que hace un par de meses lanzó Y será, canción que compuso tras una ruptura amorosa: “La verdad no me porté muy bien en la relación y salió el tema, traté de ponerme en la perspectiva de la otra persona, de su dolor”.
“Con la canción nos está yendo bien en redes”, resalta el creativo sobre su pieza, que al momento ostenta más de 87 mil reproducciones en YouTube, además de decenas de comentarios favorables.
Al hablar de redes sociales, el jalisciense comparte su opinión sobre el consumo musical actual: “Ahora suben una canción a Spotify o a YouTube, lo pautan, le meten un dineral y aparece en todos lados, es la nueva era de esta industria, así funciona; si no tienes recursos para explotar el marketing, es difícil posicionar, a menos que tengas una súper canción que se haga viral”.
“Puedes hacer una canción hoy y en dos o tres días ya se olvidó”, complementa, y luego explica que su estrategia “es sacar muchas canciones, muchos covers, hacer un spam de música, porque tienes que estar subiendo contenido, esta industria ya se maneja así. La nueva era del artista es digital”.
Respecto al auge que vive la música regional a nivel mundial con exponentes multigeneracionales como Peso Pluma, Banda MS o Los Tigres del Norte, comenta que “la industria está más tirada a los corridos, pero para todo hay momentos, aunque hay que adaptarse dentro de lo que uno hace: no es cambiar del regional al reguetón, pero sí buscar alguna colaboración para no quedarte atrás”.
“Es bonito ver a tantos chavos porque para esta música que están tocando de corridos sierreños hay que estudiar; para hacer un requinto en la guitarra es saber de armonía y no es fácil. Hay chavitos de 14 o 15 años que agarran la guitarra y como locos”, aplaude.
Aunque también encuentra un aspecto negativo: “Lo que no siento que está muy bien es el contenido de las letras de algunos autores, que tiran ahí toda la carne al asador de lo que es México y se proyecta a todo el mundo; la parte esa sangrienta, de cantarle a ciertas personas, lo veo difícil. Esa parte no me agrada tanto”.
Al final, Carlos Torres exalta que la música regional mexicana, esa de la que es un exponente orgulloso y que le ha dado “todo”, es “hermosa y es algo que hemos proyectado a todo el mundo, expresamos nuestra cultura con esa música”.
hc