La noche de este 8 de noviembre, alrededor de las 9:35, más de 65 mil personas vivieron el emocionante regreso de Guns N’ Roses a la Ciudad de México.
Desde temprano, miles de fans llegaron al Estadio GNP Seguros, antiguo Foro Sol, para ser testigos de una de las noches más esperadas del año: el cierre de la gira mundial 2025 de la banda liderada por Axl Rose, Slash y Duff McKagan.
Cuando las luces se apagaron y los primeros acordes de Welcome to the Jungle retumbaron, el público estalló con gritos. Axl apareció corriendo de un lado a otro del escenario, con la energía que lo ha acompañado por décadas. A un lado, Slash, con su guitarra Les Paul, su caracteristico sombrero y su inconfundible melena, marcó el ritmo de una noche que prometía ser legendaria.
Guns N’ Roses 'enciende' a la CdMx
Durante más de dos horas y media, Guns N’ Roses ofreció un espectáculo que mezcló la potencia del rock con la nostalgia de más de una generación que creció con sus canciones.
El setlist incluyó clásicos como Bad Obsession, Chinese Democracy y Mr. Brownstone, mientras que los coros del público se hicieron ensordecedores con Sweet Child O’ Mine.
"¿Cómo están? Buenas noches", gritó Axl, mientras el público gritó de emoción y las luces iluminaron el antiguo Foro Sol.
Uno de los momentos más emotivos llegó cuando Axl Rose se colocó su sombrero e interpretó Knockin' on Heaven's Door, acompañado de miles de voces que no dejaban de corear en el Estadio GNP Seguros. Ademas, muchos asistentes levantaron sus celulares para grabar el momento.
Un cierre explosivo para una gira triunfal
El concierto marcó el final de la etapa latinoamericana de su gira mundial 2025, que los llevó por países como Costa Rica, Chile, Argentina, Brasil y Perú antes de llegar a México.
Cada parada fue un repaso por su legado, pero el concierto de Guns N’ Roses en el Estadio GNP Seguros la noche del 8 de noviembre tuvo un significado especial: cerrar en una ciudad que siempre los ha recibido con cariño.
Guns N’ Roses rinde homenaje a Ozzy Osbourne
Otro de los momentos más emocionantes sucedió cuando Guns N’ Roses rindió homenaje a Ozzy Osbourne, quien falleció el pasado 22 de julio. La banda interpretó Sabbath Bloody Sabbath, uno de las canciones que marcó a Black Sabbath.
El cierre llegó con Paradise City, mientras Slash y Duff se despidieron tocando con una energía intacta, y Axl lanzó agradecimientos al público.
Los fans salieron con sonrisas. Algunos portaban camisetas con estampados de los Guns N’ Roses, paliacates rojos y otros más utilizaron sombreros como Slash.