Tras recibir sus tres gramófonos en la 19 entrega del reconocimiento que entrega el Latin Grammy, Jorge Drexler reconoció su sorpresa y felicidad por los resultados de la premiación, ya que desde que inició en la música lo hizo por gusto y no para vivir de ella.
"Cuando empecé a hacer canciones trabajaba en otra profesión, trabajaba en la medicina, nunca entré en la música, ni siquiera con la idea de vivir de ella, yo vivía de la medicina para la música", dijo.
Sin embargo, compartió que su pasión lo fue llevando a integrarse por completo a la música, al grado de abandonar la tradición familiar de ejercer la medicina.
"La vida me fue poniendo poco a poco ante situaciones tan increíblemente impensadas, que he dejado de razonar en función de las expectativas".
Al referirse a su vivencia en el Latin Grammy, donde estaba nominado en cinco categorías dijo:*"Yo venía aquí a celebrar, este es un encuentro gremial".
El músico también destacó que no tiene enemigos y la importancia de respetar la diversidad musical: "Hoy en día nos encontramos con un tesoro, que es la diversidad, yo no tengo enemigos en el mundo de la música, mis enemigos son los intolerantes, los fabricantes de minas antipersonas, que viva el reguetón, que viva la cumbia, que viva Borges, que viva Carmen Miranda, disfrutemos de lo que tenemos, que es un tesoro; iberoamérica tiene un futuro muy prometedor".
Mientras que al referirse al género del reguetón, que tenía un gran número de nominaciones, enfatizó: "Ese patrón rítmico no es ni siquiera nuestro, no es mío, no es de Maluma, no es de J Balvin, no es de ninguno de nosotros, viene desde el siglo XI de los burdeles de Persia, donde le llamaban el ritmo del diablo, es un ritmo de África enorme, es maravilloso, disfrutemos del cuerpo, de lo que tiene este continente para darnos, si no nos gusta algún tipo de canción, escribamos canciones mejores, no le echemos la culpa a los géneros de las cosas. Es nuestra responsabilidad como compositores, cada uno la tiene".
ES