"Gracias y hasta siempre", dijo José Luis Perales al despedirse de sus fans en el Auditorio Nacional.
"Me voy a cuidar mi jardín, mi huerto, a mis nietos y a componer canciones para que las escucheis durante mucho tiempo", añadió el cantautor a sus invitados en su última presentación en escenario mexicano.
La cita inició a las 20:45, apenas unos minutos después de la hora anunciada, 20:30, pues la lluvia se hizo presente en esa noche tan especial para el artista y sus seguidores, y retrasó el cúmulo de emociones que habrían de producirse por espacio de dos horas.
Una vez que arrancó el concierto con "Balada para una bienvenida" y uno de sus grandes clásicos, "Me llamas"; la amistad, admiración y cariño entre el anfitrión y sus invitados se materializo en coros, ovaciones y suspiros.
Él, con su clásica sencillez, al tiempo que expresaba "Gracias, gracias", llevaba la diestra al corazón para agradecer las constantes muestras de afecto.
Al lenguaje de aplausos se sumaron sus frases, esos comentarios con los que Perales llevó al origen de sus canciones y a los momentos especiales de su vida a sus amigos, esos hombres y mujeres, en mayoría en edad adulta, que le correspondían e interactuaban con él.
"Era el año 73 cuando mi primera canción vio la luz y se coló por su casa sin permiso. De eso ya son casi 50 años. Fue escrita en Cuenca como todas mis canciones. Espero la recordes", dijo y los 7 músicos que lo acompañaban ya ejecutaban las notas de "Celos de mi guitarra".
"Quisiera decir tu nombre", "El amor" y "Te vas" dieron secuencia a la velada, en la que las luces robóticas hicieron su labor, ambientando con sobriedad cada una de las interpretaciones; pues lo que reinó fue la sensibilidad del español.
Tras salir por un momento del escenario, el cantante regresó para sincerarse con sus fans.
"Quiero compartir un secreto con todos vosotros, yo era un escritor de canciones porque realmente me encantaba la música. Y decía: 'si encontrara a alguien que quisiera cantar mis canciones' . Y ellos, Mocedades, grabaron esta canción mía", dijo antes de ofrecer "La llamaban loca".
En la velada del adiós, que forma parte de su gira "Baladas para una despedida", el español también recordó la canción que más trascendencia internacional le ha dado.
"Gracias a Carlos Saura y a su pelicila "Cria de cuervos"... Una película muy sencilla, pero que convirtió a esta canción en la más vendida y llegó a todos los países. No fue culpa mía, sino que posiblemente fue por la película y el estupendo director. Pero sin duda fue por la pequeña gran voz de Janet", expresó antes de interpretar "Porque te vas", en la que discreto bailó al compás del tema.
En la cita trajo a otros de sus amigos-intérpretes. A Isabel Pantoja cuando interpretó "Pensando en tí", que comentó: "Le escribí en un momento muy difícil para ella".
Y a Miguel Bosé cuando ofreció "Creo en tí", que dijo: 'Esta la compuse con Miguel Bosé".
Raphael también lo acompañó en la cita cuando interpretó "Frente al espejo", en la cual Perales ofreció un segmento con su guitarra, pues advirtió "solo un pedazo porque no soy Paco de Lucia".
En la velada romántica expresó:
'Que levante la mano quien no ha tenido un primer amor", expresó y la respuesta fue inmediata, apenas unos segundos antes de seguir con "Hoy me acordé de tí".
Su sensibilidad erizo la piel de los asistentes cuando expresó: "Quizá esta canción que escribí hace mucho es de hoy, porque todos sabemos que lo que dice ocurre en todo el mundo", expresó y en las pantallas que estaban atrás de él ya se reproducían bosques talados, ríos secos... y los músicos ya ejecutaban las notas de "Dime".
El compositor siguió compartiendo el origen de sus creaciones: "A veces las musas me miran como diciendo vámonos que este señor ya es muy mayor, y yo me enfado y rompo los papeles, y entonces esas musas vuelven con 'Melodia pérdida' para vosotros.
"Cancion de otoño", "Ella y él" y "Gente maravillosa" dieron secuencia a la emotiva velada, en la que dio espacio a sus niños de las aldeas que ayuda.
"Esta canción habla de niños creados en Aldeas Infantiles SOS de Cuenca. Y quiero que les aplaudan mucho porque son maravillosos haciendo cosas increíbles", destacó el autor antes de seguir con "Que canten los niños".
Y añadió: "Quien la sepa ayúdenme a cantarla porque no es cosa de uno solo".
Con "Balada para una despedida" llegó el momento del adiós, aunque explicó que solo es de los escenarios pues él seguirá escribiendo.
"Gracias y hasta siempre", añadió antes de abandonar el escenario, pero sus invitados no lo dejaron irse y regresó para interpretar "El velero".
En ese momento otro de sus intérpretes salió al escenario.
"Es Carlos Rivera", dijo el anfitrión cuando su invitado ya se unía a su canto.
Al término de la canción, el tlaxcalteca agradeció la invitación: "Quiero dar las gracias, sinceramente hoy es uno de los días más felices de mi vida, hoy cumplo 36 años y el mejor regalo que pude tener, es venir a cantar contigo maestro. Sabes todo lo que te quiero, te admiro. Yo he sido uno de esos niños mexicanos que ha crecido escuchando tus canciones. Te quedas en nuestros corazones".
El anfitrión siguió con su clásico "Y cómo es él", en el que las poco más de 9 mil personas que casi llenaron el foro, se sumaron con sus coros, al igual que en "Te quiero".
Una vez más Perales volvió a dirigirse a sus invitados: "Muchisimas gracias por esta noche y por todas las que he vivido en este pais. Hace muchos años escribí esta canción pensando en este día (el del adiós) ... Y tal como nació en mi guitarra y mi voz la voy a interpretar".
Entonces, una tenue luz iluminó al compositor que sentado y tan solo con su guitarra interpretaba "Me iré calladamente".