Al filo de las 9 de la noche, Juanes inició con “A Dios le pido” su recorrido musical en el Auditorio Nacional, donde lo mismo encontró eco cuando se puso sentimental con “Fotógrafía”, que cuando proyectó la pasión que siente por el folklor de su patria con “La plata” o cuando mostró sus mejores pasos al ritmo de cumbia al interpretar “Oye mujer” y hasta cuando acompañado del mariachi entonó, muy a su estilo “El Rey” de José Alfredo Jiménez, eso sí, derrochando sentimiento, como lo hizo durante toda la noche.
Apenas salió al escenario y el colombiano provocó el diálogo con sus seguidores, mujeres y hombres, jóvenes, cuarentones y cincuentones, que apenas lo vieron se expresaron con gritos, aplausos y los coros que hicieron eco al canto del compositor, que además se lució con las tres guitarras que lo acompañaron y los cuatro músicos con los que hizo amalgama perfecta en sus creaciones.
“Nada valgo”, “Es por ti” y “Querer mejor” se escucharon por la sala, donde las escenas de las parejas que se tomaban de la mano, se abrazaban e incluso se besaban eran recurrentes, al tiempo que el anfitrión agradecía la respuesta a su convocatoria en el Auditorio Nacional, escenario “al que vine por primera vez a ver a Jaguares; así que qué gusto que ahora pueda estar aquí cantándoles”.
Emocionado, “feliz”, por la reacción de sus invitados, a quienes en más de una ocasión agradeció el apoyo que le han dado, “a los fans desde hace 20 años cuando empecé la carrera solista y a los que vienen por primera vez”; el compositor aprovechó la convocatoria para compartir su filosofía.
“Hoy que estaba escuchando lo que pasa en Chile, me quedé impresionado de ver a lo que hemos llegado, y no solo pasa en Chile, sino también en Colombia, Paraguay, Venezuela, en todas partes, incluso aquí en México… muchachos yo creo que lo más importante es aprender a amarnos, es nuestra misión, para cuando llegue el final de los días podamos decir, aprendí a amar y me amaron, tenemos que aprender todos como seres humanos, a vivir todos, porque aquí nos estamos matando, matando, literal”, enfatizó y después se apoyo en el instrumento que le ha permitido rebasar cualquier frontera, siguió con su música.
“Te amo” se escuchó en el foro tras el solemne pensamiento del cantante que dio paso a “Para tu amor”, en la que compartió la escena con Daza, con quien fundió su voz acompañándose solo de su guitarra.
En la cita también se hizo presente “La camisa negra” que levantó una vez más a todos de sus asientos y provocó que de derroche de energía y sensibilidad hiciera estragos en la cabellera del cantante, quien eligió “Me enamora” para cerrar el show.
Aunque apenas unos minutos después volvió acompañado de “Querida” y del mariachi para hacer homenaje a Juan Gabriel y luego entonar “El Rey”, provocando la euforia en la sala que lucía llena, pues pocos fueron los boletos que a medio concierto aún ofertaba la reventa en las inmediaciones del foro.
El adiós definitivo fue muy rockero porque Juanes eligió “La Luz”, con la que provocó el baile por todo el foro, que pedía más, pero el colombiano ya solo hizo una reverencia acompañado de sus músicos para agradecer el afecto.
cjr