En abril del año 2001 nació Mandragore con unas ganas tremendas de tocar metal. En un principio apuntaban hacia el doom metal. Pero las ganas de tocar a velocidades altas y riffs mucho más agresivos los llevaron por el camino del death metal, por el que han transitado con discos, videos y tocadas. Su reciente disco Light leads to nowhere (Asenath Records) captura la madurez y técnica a la que llegaron y de nuevo, ante cambios en la alineación, continúan en la conformación de su demoledora historia. Los fundadores Eduardo Castañeda Deimos y Gerardo Pérez (guitarras), más las recientes incorporaciones, Rubén Méndez (voz), Eduardo Rosales (bajo) y Joel de la Rosa (batería), conforman la alineación. Deimos platica desde Zacatecas de su nuevo CD.
¿Cuál consideras que ha sido la evolución en su sonido desde su primer trabajo hasta Light leads to nowhere?
Sin duda es el empleo de nuevas formas de crear música. Nos enfocamos en crear canciones fuertes y a la vez melódicas, usamos armonías de una manera más inteligente, riffs bien estructurados con potencia y contundencia. El control y manejo de distintas velocidades fueron fundamentales para darle matices que enriquecieron cada uno de los temas.
¿Qué temas abordan?
Todos los discos han sido conceptuales y en el caso de esta última entrega se basa en la desesperada esperanza de encontrar la luz y que al final nos lleva simplemente a la nada, por ejemplo, en la vastedad del universo en donde la luz lleva a la destrucción. Podemos mencionar una supernova, que es la explosión de un sol, genera una luminosidad que se puede percibir a millones de años luz de distancia y que, sin embargo, es un acto de destrucción masiva a escalas universales. De igual manera, la luz de alguna fe que en ocasiones no lleva a ningún lado y que somete a la gente a un devastador sistema de castigo-recompensa. La falsa luz que prometen los adivinadores, los videntes, los que leen la mano o las cartas, en fin, la charlatanería vista como una luz al final del túnel. Y también la luz deslumbradora del éxito que la sociedad reclama y premia, la política, la TV, el consumismo monstruoso, todo por conducir al ser humano por un camino de constante insatisfacción y una búsqueda eterna por ser aceptado y enriquecido por una sociedad fundada en la luz cegadora de la supuesta supremacía.
¿Cuál fue el aliciente para ofrecer un disco como debe?
Es un proceso que tiene que ver con el trabajo constante y de años de la banda. El trabajo que inicia desde el proceso de composición y termina en el estudio de grabación es largo, y debe ser así por el bien de una buena producción. Todos en su instrumento y en su papel tuvieron que superarse a sí mismos técnicamente.
¿Cómo se sienten con Asenath Records?
Ha sido genial. Nos gusta mucho su calidad y compromiso. Creo que seguiremos trabajando juntos por muchos años más.
¿Cómo está el movimiento de metal en Zacatecas?
Está creciendo. Lo que sí debo señalar es que el público muchas veces no ayuda a que la escena se eleve. Se requiere más apoyo de los fanáticos para que las bandas de su entidad tengan esa proyección que necesitan.
El disco se consigue en Dark Vission, Plaza Morelos, centro.
https://www.facebook.com/mandragoredeath/