Dos hijos pródigos regresaron a México. De qué otra manera puede llamarse a la gratitud, al agradecimiento, al amor que expresan Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina sobre el país, aunque ellos digan que se trata de una simple gira que comienza mañana en el Auditorio Nacional.
Tras una abierta crítica al dictador Francisco Franco en 1968, Serrat no pudo regresar a España. “Entonces tuve la extraordinaria oportunidad de encontrar esta otra casa (México), que me integró y me hizo sentir uno más. A partir de entonces me he sentido una persona querida y respetada aquí.
“Más que un idilio con México, es un largo amor... consumado a veces. Estoy agradecido. No hay nada más hermoso en la vida que ser amado por aquellos que amas. Toda la vida me sentiré en deuda con México”, agrega.
Para Sabina no es necesario hacer más canciones sobre México para demostrar su amor por el país; sus discos recientes rezuman rancheras y corridos.
“Cada día soy más mexicano y eso se nota en mis canciones, que ya parecen más mexicanas que españolas. Tengo un agradecimiento eterno a este país, a sus canciones populares, a José Alfredo, a Chavela Vargas...”
Serrat y Sabina están en México como parte de su gira No Hay Dos sin Tres, que los llevará a CdMx, Monterrey, Guadalajara y Querétaro. Recién desempacados de Argentina, Paraguay y Uruguay (cancelaron en Chile y Bolivia por las crisis políticas en esos países), celebran también su feminismo de siempre en plena era del #MeToo.
“Fui feminista siempre —asegura Serrat—. Nací en un país de un machismo estructural, donde las mujeres pedían permiso a su familia para casarse y al marido para tener una cuenta en el banco o para salir del país”.
—No había divorcio entonces —secunda Sabina.
—Pero había el ‘Ahí te quedas’, que se puso muy en práctica.
Sin embargo, rechazaron que haya misoginia en sus canciones y, en cambio, celebraron la “reeducación” de los hombres impulsada precisamente por el empuje de las mujeres. Eso sí, aclararon, los artistas jamás deben llegar a la autocensura en sus letras, “el arte debe seguir siendo libre y equivocarse, pero en libertad”.
Sobre el reguetón, Sabina es tajante: “Al principio me ilusionó, porque me decía, ‘¡coño!, la gente habla y rima’. Ahora prefiero que no rime, porque vaya mierda de rima que se oye por ahí”.
Para el catalán, es innegable el éxito de este género, aunque preferiría que la oferta musical moderna tuviera más variedad. “Con la música me pasa lo mismo que con la comida: como de todo, pero solo repito algunas cosas específicas”.
Esta es la tercera gira que realizan juntos. La primera fue Dos Pájaros de un Tiro en 2007 y luego La Orquesta del Titánic en 2012. Coinciden en que la parte más emocionante es que uno escuche sus canciones en voz del otro.
Los autores también expusieron sus reflexiones sobre las crisis políticas en España y América Latina. Sabina señaló que el triunfo de Vox (tercer lugar en la pasada elección española) es alarmante y aseguró que las protestas en Chile, Colombia y Bolivia revelan que “el sur está estallando, porque los gobernantes no escuchan a la gente”.
También festejó la “elegancia de siempre” mostrada por México para asilar a Evo Morales y se dio tiempo para la ironía: “En España nunca hemos tenido un gran líder como Peña Nieto”.
LAS CLAVES
EL RECORRIDO
Mañana inician en el Auditorio, van a Guadalajara, Monterrey, Querétaro y regresan a CdMx.
LA MANCUERNA
Es la tercera gira que los españoles comparten el escenario; vienen a México con un programa distinto al anterior.
LA HISTORIA
Los intérpretes han tenido una carrera en solitario en paralelo, pero sus filosofías siempre los llevan a unir su sensibilidad.