Desde Finlandia, The Rasmus visitó una vez más la Ciudad de México para dar cierre a su tour en Latinoamérica. Tras horas de espera las luces del Pabellón Cuervo se apagaron y ‘First Day Of My Life’ dio inicio al concierto en medio de gritos y aplausos.
‘Guilty’ y ‘No Fear’ sonaron consecutivamente mientras el público no paraba de gritar, saltar y corear a la banda. “Se siente bien estar de regreso, se siente como estar en casa”, dijo Lauri Ylönen, vocalista de The Rasmus.
Llegó el turno de ‘Paradise’ su primer sencillo de Dark Matters, álbum del que también tocaron ‘Nothing’ y ‘Holy Grail’. The Rasmus proyectaba energía y adrenalina con canciones como “Immortal”, “In my Life” y “Time to Burn”.
La banda originaria de Finlandia tomó un descanso para tocar un set acústico, “Not Like The Other Girls”, “Still Standing” y “Rakkauslaulu” sonaron en el recinto.
El concierto se mantuvo con la adrenalina al tope hasta llegar a su final con “In The Shadows”, canción que parecía pondría fin al evento, pero el concierto aún no había terminado, Eero Heinonnen, bajista de la banda, salió al escenario con una guitarra acústica: “Esta es una canción que todos ustedes conocen”, dijo y ‘Feliz Navidad’ sonó en el lugar.
The Rasmus subió de nuevo al escenario para despedirse de sus seguidores con “Wonderman” y “Sail Away”. La agrupación sostuvo una bandera de México, agradeció el apoyo de los mexicanos y prometió regresar pronto.
Tras más de 20 años de trayectoria, The Rasmus ha representado a toda una generación y especialmente se han mantenido fieles a sus seguidores mexicanos y ellos a la banda. Tras su gira por Latinoamérica, en la que visitaron países como Argentina, Brasil y Chile, México fue el país elegido para cerrar con fuerza y adrenalina el ‘Dark Matters Tour’, una vez más el cariño de la banda hacia las tierras aztecas fue evidente.
DIGL