Si tú eres fan de Bradley Cooper, debo decirte que el actor y recién debutante como director en la galardonada Nace una estrella, junto a Lady Gaga, dedicó años a investigar, escribir, rodar y actuar en esta biopic sobre el famoso compositor y director estadounidense Leonard Bernstein.
La trama de la película nominada al Oscar 2024 retrata la historia del afamado compositor y director de orquesta dentro del mundo de la música clásica, sin embargo, ésta se profundiza y sostiene sobre la relación con su esposa de origen chileno, Felicia Cohn Montealegre, interpretada por Carey Mulligan.
“Me hice adulto rodando Maestro”, señaló Bradley Cooper, quien se hiciera conocido por su participación en la comedia ¿Qué pasó ayer? de 2009
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Ahora, si no estás familiarizado con quién es el legendario Leonard Bernstein, podrás notar que en este filme su bisexualidad toma protagonismo de un modo sutil y evidente, y provoca uno de los conflictos principales del protagonista, y así es como Bernstein se mantiene en ese juego de roles entre marido heterosexual y amante homosexual.
La lucha por ocultar a sus tres hijos sus preferencias sexuales, se maneja de manera natural y emotiva, lo que también nos muestra a un padre amaroso que procura, sobre todo, mantener el círculo familiar unido.
Algo que le agradezco a Cooper, es el hecho de lograr poner la atención del televidente sobre la desgarradora situación entre Bernstein y su esposa; esta relación termina llevándose la cinta, apoyada de un tremendo trabajo de Carey Mulligan, y no centrando el foco sobre la sexualidad del histórico director. Al final vemos una progresión y conjunción bastante armoniosa a través de imágenes intensas e impredecibles.
Esto fue recalcado por el mismo Cooper:
“Durante mi investigación y escritura del guión, fue la relación entre Leonard y Felicia lo que me intrigó y se convirtió en el punto central”.
Si desconoces la vida del compositor, debes saber que él fue famoso por plasmar sus sentimientos en la música de manera intensa, con dureza, pero a su vez gentileza, y con ello, sus composiciones trascendieron la barrera de la música clásica.
En el filme quedan impresos sus grandes momentos: desde su paso por la Orquesta Filarmónica de Nueva York, hasta sus anales por su partitura de West Side Story -gran éxito de Broadway- de manera victoriosa, no obstante me hubiera gustado ver un poco más de profundidad y respiro entre estos clímax de su vida profesional, los cuales fueron claves para el ascenso a la fama del director.
Es por ello que la película, por momentos, carece de organización en cuanto a sus elementos, y aunque entendemos que no es una historia lineal, a veces la película impide la apreciación del punto escénico en el que se encuentra nuestro personaje principal.
Cabe resaltar que la familia del propio Leonard Bernstein aprobó la transformación de Bradley Cooper para dar vida al director de orquesta, especialmente sus tres hijos, Jamie, Alexander y Nina Bernstein, quienes se pronunciaron al respecto:
"Bradley Cooper nos incluyó a los tres en cada paso de su increíble viaje mientras rodaba la película sobre nuestro padre."
"Nos conmovió hasta la médula ser testigos de la profundidad de su compromiso, su amoroso abrazo a la música de nuestro padre y la desbordante alegría que le aportó a su exploración".
Y es que pese a la polémica desatada por los prostéticos usados en Cooper para exagerar la nariz de Bernstein, debido al estigma de 'jewface' ('cara de judío'), una práctica que pretende compartir una visión estereotípica y falsa de la población judía, los descendientes del compositor siempre lo vieron de buena manera.
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Finalmente si te gustan los biopics, podrás darte cuenta de que la película contiene argumentos para llevarse varios premios de su larga lista de nominaciones, y podría seguir los pasos de Bohemian Rhapsody y El Método Williams, como una cinta biográfica que triunfe las galas más importantes del cine. El largometraje fue nominado a los Globos de Oro en las categorías de Mejor película, Mejor actor y Mejor actriz.
En cuanto a los premios Oscar, el filme fue bien recibido con siete nominaciones en total, incluyendo Mejor Película, Mejor Actor y Mejor Maquillaje y Peinado.
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Ante esto, debemos destacar que el proyecto se encuentra respaldado por ni más ni menos que Martin Scorsese y Steven Spielberg, ambos fungiendo como productores de esta emotiva cinta. Dicho esto, no es coincidencia su éxito pese a los vacíos que esta película pueda presentar.
Al final, si eres fan de las historias de amor, debo decirte que esto es todo lo que la cinta te puede ofrecer, haciéndolo de manera íntima e intensa.
Es un viaje por la vida de una célebre persona que pasa por momentos crudos y que, a todo, su relación con Felicia es lo que mantiene su ‘barco’ a flote ante las tentaciones y excesos que una vida ante el reflector de la fama le otorga de manera violenta.
Pese al poco enfoque de la cinta hacia la prolífica carrera de Bernstein, se percibe de manera especial el tamaño de su éxito
La muerte de Felicia es el elemento que rompe a nuestro personaje, dándole incluso más peso y emotividad a la relación compartida por ambos durante casi 30 años y, no es hasta este punto en el filme, en el que llega la perdición e incertidumbre sobre el protagonista.
Los detalles sobran y la intensidad resalta. Bradley Cooper hace un gran trabajo, entregando la vida de una de las figuras más importantes en el mundo de la música clásica, con alta intensidad y sentimiento, retratando a su personaje en la vida real de la manera más fiel y atractiva posible.
Pero en fin, yo solo soy un fan.
evt