Sin importar el frío en la Hacienda las Chichihuas en Ensenada, Baja California, el público se conmovió, recordó, bailó y cantó en el concierto que Ricky Martin ofreció como arranque de su gira por México.
“Derritiendo el frío, porque vengo con mi gente”, fueron las primeras estrofas que entonó el boricua para dar inicio a “Cántalo” (que en su versión original interpreta con Bad Bunny y Residente) y así dar pie a su concierto que llevaría a los miles de espectadores a bailar.
En un principio fue tan difícil crear movimiento entre el público en el inmenso recinto, que hasta dijo : “¿qué, no bailan?”. No obstante, el ritmo fue calentando a los fanáticos con canciones como “La bomba” y “Bombón de azúcar”. Cuando llegó el momento de su más reciente sencillo, “Tiburones”, el cantante mencionó: “Esta canción me encanta, porque trata de las relaciones y tenemos que hacer lo que sea para trabajar entre nosotros”.
El escenario se iluminó de tonalidades moradas con azul creando un ambiente romántico. “Vengo a pasarla bien, todos estamos aquí para pasarla bien, ¿se puede o no se puede? Aquí hay gente maravillosa en Ensenada, por eso decidí empezar aquí la gira por México, así que muchas gracias”, dijo el cantante a la audiencia.
Los aplausos y gritos de personas de todas las edades hicieron que para “Livin’ la vida loca”, todo entrara en calor, al ver a las bailarinas con coreografías en un momento más sensual, vestidas de negro y la tarima llena de color, apoyados de dos pantallas a los costados para que la gente que estaba hasta atrás pudiera observar de mejor manera el concierto.
Bajo la luz de la luna, completamente a la intemperie, el cantante puertorriqueño se acercó a la silla que le esperaba en medio de la tarima para interpretar sus clásicos “A medio vivir” y “Fuego contra fuego”.
Romanticismo
“Mi parte favorita de este concierto es la romántica, podemos entrar a ese camino donde empezamos a recordar tiempos maravillosos, cosas más simples e improvisar, porque se puede, porque podemos. Es importante para mí cantar estas canciones, porque México posicionó en los primeros lugares de popularidad estos éxitos, que después recorrieron Latinoamérica”.
Segundos después comenzó la balada “Te extraño, te olvido, te amo”, momento en que el público cantó a un son melancólico para después entonar el tema “Tu recuerdo”.
El boricua destacó que en la gira no tenía planeado interpretar “Fuego de noche, nieve de día”, “No la he cantado en el tour, pero esta noche lo haré para ustedes”, y para ese momento el público ya había entrado en calor y cantó a todo pulmón con sus bebidas y copas en la mano.
Tras unos minutos de cambio de escena, los bailarines de Ricky Martin se apoderaron del escenario con impactantes movimientos, entre sonido de tambores y colores para darle nuevamente la bienvenida al cantante que siguió con “Lola”, “She Bangs” y “Vuelve”.
“Pégate”, “Mordidita” vinieron después y cuando llegó “María” los fanáticos, que en su mayoría eran mujeres, no dejaron de gritar, provocando el éxtasis.
Éxito, baile y sensación
Bailarines
Uno de los grandes espectáculos de la noche fue su grupo de bailarines, el cual lo acompaña en los temas más rítmicos del show y con los que logran un gran dominio sobre el escenario y los aplausos del público.
Pasión musical
Apoyados por visuales que dieron mucho color al lugar, luces, chispas, dejaron claro su gran producción, con temas como “La Copa de la Vida” y “Vente pa’ acá”, entre otros. Las pantallas lograron un efecto especial.
Su canto
El cantante tiene programadas varias fechas por todo el país, las cuales incluyen visitas a ciudades como Hermosillo, Monterrey, Torreón, Guadalajara y Querétaro; para Ciudad de México llegará el 21 de marzo al Foro Sol.