La ola de violencia que atraviesa al país ha robado no solo vidas, sino también futuros. En medio de este contexto hostil, Sujo se convierte en un retrato que invita al público a mirar de frente el impacto del narcotráfico en las infancias; la película dirigida por Astrid Rondero y Fernanda Valadez llega esta semana a las salas de cine con un tono de esperanza.
“Sujo parte de entender que llevamos más de 20 años de esta mal llamada guerra contra el narcotráfico, hay varias generaciones de infancias que han nacido en este contexto y por eso lo hacemos. Hay cifras devastadoras, la Unicef estima que más de un millón de niños se han quedado huérfanos por la violencia del narcotráfico”, dijo Valadez a MILENIO.
¿Qué les espera y qué podemos hacer como sociedad? es la pregunta de las cineastas: “Tratamos de verlo no nada más a través de la violencia, que es innegable, sino también de la posibilidad de la esperanza, que es lo que estamos proponiendo aquí: la posibilidad de imaginar un futuro justo y distinto para todos esos niños y niñas”, agregó Fernanda.
PARA LAS MUJERES
La película es también una carta de amor al poder femenino, no solo en los personajes que rodean a Sujo, sino en la mirada misma de sus creadoras, como lo explicó Astrid Rondero.
“La figura de las mujeres nos parece importante, lo venimos retratando desde Sin señas particulares, con las madres buscadoras y las madres que se vuelven activistas”.
En el caso de Sujo, el cuidado y la formación de los niños queda en manos de las mujeres, “porque muchos hombres migraron o fueron reclutados por el crimen organizado —dijo Rondero—, y para ser sinceras, es también la experiencia que tenemos Fernanda y yo al contar la historia de un chavo creciendo; somos dos mujeres contando su historia”.
En Sujo vemos muchos Méxicos, “está el México de la violencia y el del crimen organizado, pero también está este otro México de la Universidad Nacional Autónoma de México, ese símbolo de la universidad gratuita. Ahí reside este otro personaje que finalmente termina por ayudar o acompañar a Sujo a un destino distinto”, agregó Rondero.
El viaje de Sujo no es solo el de un niño que hace frente al peso del crimen organizado, tras la muerte de su padre, es también una travesía personal para el actor Juan Jesús Varela, quien desde su participación en Sin señas particulares ha crecido junto a sus directoras “y eso, para nosotras es un lujo, es un chico con un talento inmenso”, dijo Astrid. _
Claves
Para el personaje
“Fue ir enriqueciendo un poco sobre sus actitudes, sobre la mentalidad de Sujo”, dijo Juan Jesús Varela.
El mensaje
“La historia te deja un mensaje muy claro, lo que quiere transmitir el personaje es esperanza”, añadió.
AJR