Después de su fiesta de cumpleaños Ema (Sara Pinet) despierta y se da cuenta de que su novio Nico está desaparecido; acude con el policía Valdemar (Horacio Trujillo) y la periodista Irene (Paula Watson), uno se rehusará a ayudarla y la otra publicará un artículo que se volverá viral y afectará a Bernie (David Calderón), a quien Ema acusa como supuesto culpable del asesinato de su pareja. Pat (Luis Eduardo Yee), amigo del acusado, buscará una réplica de dicho texto.
Así, a través del suspenso y el thriller, la puesta en escena Tal vez mañana sea un día cualquiera retrata el linchamiento mediático, el peligro de las redes sociales, la victimización, la doble moral, las desapariciones y la corrupción; el director Alejandro Ricaño busca dejar atrás la perspectiva de la víctima y el victimario, que solo ha enseñado a la sociedad a dividirse entre buenos y malos.
“Creamos la obra a partir de una serie de eventos y situaciones, por ejemplo, el uso redes sociales y la mediatización de la sociedad, donde ahora parece que lo que pones en tus redes es más verdecido de lo que sucede fuera de ellas; a partir de la sensación de que esto es un abuso y polariza más a la sociedad, surge más esta idea de hacer un texto que contenga una anécdota donde puedan hacerse visibles estas opiniones”, dice Luis Eduardo.
El actor también participó en la dramaturgia, junto a Ricaño; aunque en realidad todo el equipo ayudó. Menciona que ellos hicieron una estructura que fue discutida por todos, se hicieron diversas versiones, se corrigieron cosas y apretaron tuercas para que funcionará en su totalidad.
“Es muy distinto trabajar este tipo de obra, que es más hacia el thriller, siento que es una obra que tiene como su interés puesto y su ojo en el suspenso que se genera. También fue una manera peculiar de trabajar, no lo hicimos juntos, ensañamos en parejas mucho tiempo y, luego, ya hicimos el ensamble”, añade Pinet y es que en el pequeño escenario se les verá de dos en dos.
En cada acto, ellos mismos son los que acomodarán la poca utilería, en un piso giratorio que permite que el público, sentado a lo largo de las cuatro paredes, pueda observarlos desde cada ángulo conforme avanza la historia; este lunes, previó a su estreno, dieron una función especial en la que demostraron lo funcional de su juego en escena.
Tal vez mañana sea un día cualquiera se presentará del 17 de mayo al 14 de julio en el Foro Lucerna; cuenta con la escenografía e iluminación de Jesús Hernández, Rerildy Bosch hizo el vestuario, Marcela Estrada se encargó del diseño de maquillaje y tanto David Ortiz como Ricardo Estrada compusieron la música original.
ES