Game of Thrones inició su octava temporada con un reencuentro poco esperado, pues Bran Stark y Jaime Lannister se vuelven a ver después de años del incidente en el que el miembro de la dinastía Stark quedó paralítico.
En el primer capítulo de la nueva temporada, Lannister llega a Winterfell tras pelear con Cercei, quien quería faltar a su palabra de enviar tropas para pelear contra los caminantes blancos.
Al bajar de su caballo se encuentra con una gran sorpresa, Bran que lo mira de frente y a quien no había vuelto a ver desde que lo lanzó de una torre cuando era un niño tras descubrirlo besándose con su hermana.
Bran Stark lo mira desafiante, pues al contrario de como sucedió en la primera temporada, ahora no es un niño indefenso y es capaz de mucho más de lo que muchos esperan de él.
El primer capítulo de la última entrega de Game of Thrones también mostró el emotivo reencuentro de Bran con su medio hermano Jon Snow.
Durante unos segundos, los hermanos intercambian palabras y se advierten sobre la gran guerra que se avecina con los caminantes blancos.
DIGL