Fue hace casi una década cuando el productor James Younger y el actor Morgan Freeman comenzaron a preguntarse sobre la vida en la serie de ciencia Through the Wormhole; tras un par de años, decidieron continuar con sus reflexiones pero desde la fe, y así surgió La historia de Dios, que este domingo estrena su tercera temporada por National Geographic.
“Al hacer Through the Wormhole teníamos muchas preguntas sin resolver, era casi como hablar de religión y preguntarse ¿por qué estamos aquí?, ¿qué debemos hacer aquí?, ¿qué nos sucederá al morir? Morgan estaba fascinado con esas grandes interrogantes, así que decidimos enfrentar la gran pregunta suprema: sobre Dios, cómo la gente ve a Dios y cómo Él moldea vidas”, dijo Younger a M2.
Agradece por este proyecto y lo que le ha dejado; han tratado de entender las diversas filosofías, desde el cristianismo, judaísmo, islam, zoroastrismo, las creencias de los nativos americanos y otras, compartir tiempo con esas personas y comprender sus vivencias lo conecta con un todo.
“Una de las creencias básicas es que tú debes tener buenos pensamientos, buenas palabras, buenas acciones. Esta es la filosofía de la vida en la cual muchas religiones evolucionaron y es muy universal; piensas cosas buenas de otras personas, dices cosas buenas sobre ellas, haces cosas buenas… Aprendí que aunque cada una tiene ciertos aspectos, son muy universales y todos lo podemos entender”, mencionó.
El viaje que comenzó en 2016 los ha llevado por Asia, África y Europa, sin olvidar toda América; este año, la pantalla mostrará su paso por sitios como India, Nepal, Vietnam, Francia, Roma, Inglaterra, Canadá y Guatemala. Esto es lo que, en su opinión, hace especial a la serie y la diferencia de cualquier otra producción.
“Fuimos a lugares a los que nadie iría, tuvimos conversaciones poderosas, emocionales y visitamos lugares increíbles (...) Conocimos gente increíble, por ejemplo un exorcista del Vaticano, gente que tuvo experiencias cercanas a la muerte, alguien en el norte de Vietnam que era prácticamente un chamán, encontramos a una diosa viviente, una joven que es la reencarnación de una diosa”, indicó.
Y añadió: “Es un gran viaje alrededor del mundo, explorando a Dios, el bien y el mal, lo zen, lo divino, tenemos muchas historias de cómo las vidas de la gente han sido transformadas por la fe”.
CLAVES
30 ciudades recorrió la producción, su viaje suma casi 80 mil 500 kilómetros.