El Carpool Karaoke se vistió de gala con la presencia de Paul McCartney, quien en compañía de James Corden recorrió las calles de Liverpool y, al mismo tiempo, repasó su trayectoria musical e interpretó algunos de sus nuevos temas.
El ex Beatle interpretó los grandes éxitos de The Fab Four, incluidos "Drive My Car", "Blackbird" y "When I'm 64".
Después de burlarse de la primera canción que escribió, "I Lost My Little Girl", McCartney se dirigió hacia el carril de los recuerdos e interpretó "Penny Lane".
El cantante llevó a Corden al lugar en el que él y John Lennon solían ensayar "She Loves You", ahí contó cómo el padre de McCartney pensó que el coro tenía sonar menos americano y deberían cantar: “She loves you/Yeah, yeah, yeah”.
El ex Beatle también platicó sobre cómo la inspiración para "Let It Be" vino de un sueño que tuvo en la década de 1960, en el que su madre, quien ya murió, le aseguró: "todo va a estar bien, sólo deja que sea". Su interpretación de esa canción hizo llorar a Corden.
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