El 29 de enero de 1969, los Beatles presentaron y grabaron su último concierto desde la terraza del edificio Apple Corps, su estudio de grabación en la ciudad de Londres.
Cuatro años antes —el jueves 19 de agosto de 1965— los entrevisté durante la conferencia de prensa organizada por la estación KILT de Houston. Martin Taylor, director de la revista Radio y Televisión, nos había registrado a Julián Villarreal y a mí como representantes de la estación XERG 690 AM de Monterrey y éramos los únicos periodistas mexicanos presentes en la conferencia, situación que nos dio un lugar y tiempo preferente durante las preguntas a John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr.
Paul, ¿cuándo visitarán México?
Pronto, muy pronto, quizá el año próximo.
John, ¿a qué músicos admiran en Norteamérica?
John Lennon: Sólo dos, Bob Dylan y Little Richard.
Paul McCartney: También a Elvis Presley… y Jerry Lee Lewis.
¿Y de Inglaterra?
J.L.: A los Rolling Stones, los respetamos
P.M.: ¿Y esa foto del periódico qué es?
Paul McCartney se refería a una plana del periódico El Porvenir donde aparecía el Cuarteto de Liverpool con la frase “Ellos los conocerán”, que llevaba los nombres de quienes habían ganado los boletos en Monterrey para asistir al concierto.
La pregunta sobre la posibilidad de un viaje de los Beatles a México llevaba la intención de aclarar un rumor sobre la cancelación del concierto de la banda para septiembre de ese mismo 1965.
En los periódicos de la época se publicaba que “El regente de la Ciudad de México, Ernesto P. Uruchurtu, a través del censor oficial, un señor de apellido Delfín, había ordenado la cancelación del que sería el primer concierto de los Beatles en nuestro país”.
Para algunos, la respuesta cortante de Paul lo confirmó.
Al terminar las preguntas, les grabamos un saludo para sus fans de la XERG 690 AM, en donde ya había nacido por iniciativa de Adrián Ojeda, nuestro director de programación, La hora de Los Beatles, que se transmitía a las 18:00.
Sobra decir que los dos conciertos que ofrecieron –tarde y noche – fueron todo un éxito. Del concierto de la noche recuerdo todavía la histeria de las jovencitas, los gritos constantes de los fanáticos y algunas interrupciones por problemas con el sonido que ponían de mal humor, sobre todo a John Lennon.
La molestia de Los Beatles se había originado desde la madrugada de ese mismo jueves y según la prensa local, por problemas en la recepción de los cuatro músicos y el traslado al Sam Houston Coliseum.
Todo eso no impidió el éxito que tuvieron en los dos recitales. Del espectáculo al que asistimos Julián y yo, todavía tengo grabado el momento en el que fueron anunciados por el locutor de la estación KILT Radio y que prendió la mecha de un fenómeno de masas que yo no conocía y que, a 57 años de haberlo vivido, aún me transporta a una época que alguien calificó como “Los años en los que éramos jóvenes, felices e indocumentados”.
O como también lo decía mi inolvidable amigo locutor Antonio Barrios Elizalde: “¡Lindo haberlo vivido, para poderlo contar!”