La Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) acusó al gobierno de Guerrero de sembrar armas en la camioneta donde fue abatido su compañero normalista, Yanqui Rothan Gómez Peralta.
Mediante un comunicado, la FECSM aseguró que en el filtro de revisión ubicado en el libramiento a Tixtla había personal de la Policía del Estado y de la federación.
“La Guardia Nacional y policías estatales agredieron a compañeros normalistas de Ayotzinapa, detonando sus armas de fuego, ocasionando que uno de nuestros compañeros falleciera horas posteriores al ataque”, señaló el comunicado.
“Hacemos responsables al mismo gobierno de la fabricación de delitos y la siembra de armas”.
La FCESM recordó que hubo una situación similar el 12 de diciembre de 2011, cuando elementos de la Policía Ministerial obligaron a un estudiante de la normal rural a detonar un rifle de asalto AK-47, con lo que dio positivo en las pruebas de balística que se le hicieron.
En esa ocasión, refirieron que “los policías que realizaron el crimen fueron los mismos que manipularon escena, limpiando y retirando la camioneta”.
En consecuencia, la federación hizo responsable de lo sucedido a los tres niveles de gobierno por el ambiente de criminalización que existe en contra de los estudiantes de las normales rurales.
Horas antes del suceso, indicaron que trataron de amedrentar a otros dos estudiantes de dicho plantel, a los que agredieron verbalmente y amenazaron, pero no aportan más detalles de ese otro suceso.
En el cierre del comunicado, la FECSM exigió justicia en el asesinato de su compañero Yanqui Rothan Gómez Peralta y la liberación de otro más que se encuentra detenido, del que hasta el momento no se maneja la identidad.
Tras conocer que Yanqui Rothan había sido abatido, normalistas de Ayotzinapa con el rostro cubierto dirigieron un mensaje a medios donde lamentaron que "ser un estudiante es un pecado, ser normalista rural es un delito".
"Esa unidad debió ser remolcada (la camioneta), con esto y mediante los diálogos que tuvimos con testigos, vecinos, ellos decían que los policías empezaron a sembrar pruebas. Con esto podemos ver cómo el autoritarismo de esta cuarta transformación está llegando a un punto en el cual está siendo uno más del montón".
ROA