Directivos del Módulo de Riego 03 de San Jacinto - Jerusalén condicionaron que no habrán de aceptar la liberación de agua de la presa Francisco Zarco para el Plan Agua Saludable para La Laguna, hasta en tanto se informe con claridad del proyecto a los usuarios del Distrito de Riego 017 y se paguen "deudas históricas" con los pobladores de Nuevo Graseros al no haber sido indemnizados desde su construcción de esa misma presa y donde ahora es el vaso.
Expusieron que resulta inaceptable que a más de 50 años de la construcción de la presa 'Las Tórtolas', todavía a estas alturas no se les haya pagado a los ejidatarios sus tierras afectadas por la construcción de esa presa reguladora, y todavía estén pensando en nuevos proyectos para disponer 200 millones de metros cúbicos del agua que pertenece a los usuarios de los 17 módulos del Distrito de Riego, y aún más en el área de Lerdo donde suponen la construcción de una potabilizadora.
Benjamín Mijares y Margarito Favela, presidente y tesorero del Módulo de Riego 03 de San Jacinto- Jerusalem, sostienen que es fecha la Comisión Nacional del Agua los ha ignorado en su exigencia de dar una respuesta clara a este proyecto presidencial para dotar de agua a los habitantes de la zona metropolitanas.
Hicieron ver que no se oponen al proyecto al considerar que primero está el consumo humano, pero sí al menos desean que se dé una explicación clara de la propuesta y que además exista para los productores algo de reciprocidad para ellos, sí van a disponer del agua que les corresponde, ya sea con un programa de mejoramiento y eficiencia en el uso de riego, obras de infraestructura hidráulicas y de nivelación de tierra para un mejor aprovechamiento de los riegos.
Hicieron ver que hay muchas lagunas en la propuesta del proyecto que no han sido especificadas a los productores usuarios del Distrito de Riego 017 Laguna Durango-Coahuila, como la supuesta aportación de 50 millones de metros cúbicos que está ofreciendo la iniciativa privada o los pequeños propietarios, pues se ignora hasta ahora de dónde los van a sacar, lo que ven como un acto simulado para que al final sean los productores ejidales los más afectados.
“Nosotros queremos que se nos explique bien el proyecto, saber cómo está, porque así como se han venido manejando, estamos a ciegas”, dijo Mijares.
Margarito Favela sostuvo que está por verse su intención de que pretender disponer de 200 millones de metros cúbicos anuales de la presa para potabilizarla y conducirla a la zona metropolitana, ya que los campesinos requieren también certidumbre, comenzando con el pago de deudas “históricas” que se han venido aplazando por parte del gobierno, como es el caso de los habitantes de Graseros, que fueron despojados de sus tierras donde vivían para construir ahí el vaso de la presa Francisco Zarco, pues es fecha que no han sido indemnizados.
AARP