Ahorros de más de 300 millones de pesos, la conducción del agua a lo largo de siete kilómetros por el río Nazas y recarga del acuífero, al mover el punto de la represa derivadora Agua Saludable para La Laguna siete kilómetros aguas abajo, ubicándola en el sector de la represa de La Goma, fuera del área de afectación de las áreas naturales protegidas.
Esta es la propuesta dada a conocer por los miembros de las Redes de Innovación de Agua y Recursos Ambientales (Riara), el Consorcio de Redes de Innovación Cooperativa de Coahuila (Cric), en coordinación con el Coecyt Coahuila.
El Riara, agrupa a investigadores, expertos en agua, organismos de la sociedad civil, empresas y entidades de gobierno, quienes hicieron este análisis con información que les proporcionó la propia Conagua, en el que coincidieron en las bondades del proyecto Agua Saludable, su estructura y sustento en términos de ingeniería; aunque también realizaron algunas propuestas con la intención de disminuir el impacto negativo al medio ambiente.
Entre los miembros de la agrupación se encuentran, Avelino Hernández Corichi, coordinador del Coecyt en La Laguna, Arturo Vaca Durán, presidente de la CRIC; así como el encargado de las Riadas, Ricardo Peláez, quienes coincidieron que se debe apostar a construir una represa fuera del área de impacto medioambiental protegida.
¿De qué trata el plan B de Agua Saludable?
El “plan b” para el proyecto Agua Saludable para La Laguna elaborado por el Riara y el Cric, permitirá ahorros, sustentabilidad del medioambiente y evitará el conflicto de afectación a la zona protegida del Cañón de Fernández, ya que contempla, que la represa se ubique fuera de la zona de impacto ambiental de esta área.
En total existen ocho presas derivadoras entre la presa Francisco Zarco y la derivadora San Fernando, tramo en que el agua del río Nazas recorre 56 kilómetros:
“Se propone bajar el punto de selección de la nueva derivadora siete kilómetros aguas abajo hacia la represa derivadora de La Goma”.
De esta manera, se cancelarían los trabajos de excavación y líneas de conducción, lo que representaría ahorros al proyecto y se evitarían afectaciones.
En términos generales, se estima que el trabajo de excavación y tubería puede llegar a cotizarse en 50 millones de pesos por kilómetro. Por lo que la propuesta de Riara, es aprovechar 6.5 kilómetros de infraestructura verde adicional por el cauce natural del río Nazas, hasta llegar finalmente la represa de La Goma, generando ahorros por 300 millones de pesos.
De acuerdo a la Conagua en su documento Análisis Costo Eficiencia Agua Saludable para La Laguna, el presupuesto contemplado para la construcción de la infraestructura del acueducto, es de 2 mil 406 millones de pesos, que consideran aproximadamente 47 kilómetros de tuberías y otros trabajos:
“Lo importante es rescatar el concepto de infraestructura verde manteniendo un río vivo”, insistió Peláez.
La propuesta contempla cancelar 6.5 kilómetros de trabajos de excavación y líneas de conducción, lo que representaría ahorros al proyecto y se evitarían afectaciones al área natural protegida del Cañón de Fernández. Ricardo Peláez argumentó:
“Es muy fácil criticar las cosas. La autoridad ha sido seria en la forma en cómo ha presentado este proyecto. Sin embargo vemos que siempre es bueno plantear una alternativa b, desde las instituciones de la política pública, más que la ingeniería pura, se tienen que ver todos los elementos para tomar una decisión. De tal manera que cuando se analiza a profundidad, se ve que es difícil que haya un solo ganador, pero esto no tiene que ver con pérdidas, sino compartir”.
En tanto, Avelino Hernández, coordinador del Coecyt en La Laguna de Coahuila señaló: “Esta propuesta puede generar ahorros, es un acto ecológico sustentable. Quisiéramos que se entendiera que con esta propuesta no se afectaría el Cañón de Fernández”. En general, los miembros de esta Red, coinciden en que el proyecto de Agua Saludable para La Laguna resulta excelente y tiene los elementos adecuados: “Sólo aportamos se pudiera cambiar el trazo, lo que permitiría evitar conflictos, generar ahorros, y ganar en sustentabilidad”.
CALE