Las vacaciones de Semana Santa arrancaron en Puebla y cientos de familias se dieron cita en el Centro Histórico de la capital para disfrutar de sus monumentos y edificios históricos, así como sus calles, las cuales lucieron libres de comerciantes ambulantes.
Así lo pudo constatar MILENIO Puebla tras realizar un recorrido en el primer cuadro de la ciudad, donde elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) montaron un operativo para impedir la instalación de comerciantes informales y de mujeres que ejercen la prostitución en calles como la 5 de Mayo, 3 Norte y 2 Norte, así como las aledañas desde Reforma hasta la 12 Poniente-Oriente.
Lo anterior fue aprovechado por los comercios formales del Centro Histórico, que al no tener que competir con los negocios informales, lucían repletos en sus establecimientos tanto de turistas locales, nacionales y extranjeros.
Ese fue el caso de los restaurantes en Los Portales del Zócalo y en puntos de alta tradición como El Parián y Los Sapos, donde familias y parejas degustaron los platillos típicos de la gastronomía poblana. Dicho escenario se replicó en otros lugares como heladerías, dulcerías, panaderías, pizzerías, taquerías y zonas de comida rápida.
Asimismo, el inicio de la Semana Santa provocó que los feligreses poblanos comenzaran a llenar las múltiples iglesias que hay en la zona Centro de Puebla, como el Santuario de Nuestra Señora de la Merced, el Templo de Santa Catarina de Siena, la Iglesia del Señor de las Maravillas, entre otros.
Cabe recordar que Puebla se encuentra en color verde del semáforo epidemiológico federal y la Secretaría de Salud (Ssa) estatal declararon a inicio de la semana que la cuarta ola de contagios había llegado a su fin, con menos de 40 casos positivos por día y, en promedio, una defunción cada 24 horas.
CHM