Todos los días Eduardo Iván Álvarez Moreno se despierta pensando que los últimos meses han sido una pesadilla, deseando que todo fuera un mal sueño. Desde hace cuatro meses, se sincera, los médicos viven en una mezcla de presión, ansiedad y pánico al atender pacientes covid, pero les gana su oficio y se impone su deseo de salvar vidas.
Sostiene que en Torreón han fallecido 25 médicos contagiados por covid-19 y el riesgo de los doctores de llevar el virus hasta su hogar crece con el aumento de casos, es por ello que cada vez es mayor el porcentaje de especialistas que ofrecen consultas privadas solo por video-llamadas a pacientes que admiten -y no admiten- complicaciones respiratorias.
La jornada diaria del médico cirujano, urgenciólogo quirúrgico con maestría en Ciencias Médicas y Biotecnología, e integrante del equipo de Urgencias del ISSSTE Torreón inicia con una oración junto a sus colegas en donde el personal ruega a Dios protección y calma para evitar contagios.
¿Cuál es su diagnóstico sobre la situación de La Laguna en la pandemia actual?
En la región estamos en el pico máximo, es un momento muy relevante en cuanto a fallecimientos y transmisión del virus.
¿A qué adjudican este repunte?
El principal factor es el desconocimiento, no se puede hablar de la ignorancia. La ignorancia es involuntaria, el desconocimiento es voluntario. En este momento hay personas que hacen su vida normal cuando todas la autoridades de salud previenen sobre el riesgo de cualquier tipo de contacto físico.
Es una enfermedad que no tiene precedente en cuanto a morbimortalidad, sin embargo la gente no toma conciencia necesaria. Por ejemplo, los antros que están cerca de la Calzada Colón están abiertos y acumulan demasiada gente. Aún en esta época existen personas que tienen la ignorancia de decir que no existe el virus, eso va a encaminado a tendencias de carácter religioso. Se supone que debemos de tener la guardia en alta, pero ya la bajamos y eso nos trajo una muy, muy alta reincidencia en contagio y fallecidos.
¿Ha cambiado la forma en que los médicos se aproximan a pacientes covid-19
Hace nueve meses el tratar a un paciente covid era colocarse cubrebocas y guantes. Ahora existen directrices que marca la Cofepris que indican que cerca de 29% de los contagios a nivel mundial corresponden a personal médico, no de enfermería, no de servicios de salud adyacentes. De cada 10 personas que fallecen por covid, 3 son médicos.
Los forma de trabajar ha cambiado. La diferencia es que ahora, yo no atiendo enfermos presencialmente (en consulta privada), sino por videocámara. En Torreón han fallecido 25 médicos contagiados por covid.
Familiares de pacientes piden una consulta diciendo que al enfermo le duele el tobillo o un dedo, pero cuando llegas y los ves están totalmente deteriorados con una oxigenación de 50%, entiendes que el paciente ya no quiere decir que el paciente tiene problemas respiratorios
¿La sintomatología con la que reciben a los pacientes ha variado?
En un principio los recibíamos con tos, ese es el dato patognomónico (síntoma especifico de una enfermedad) se anexaba fiebre arriba de 40 grados, dolor de cabeza intenso, malestar general, dolor en la espalda en solo en algunas ocasiones diarrea, náusea y vómito, pero sobre todo un impresionante o estado de ansiedad y pánico.
Creo que ahora los pacientes se han mentalizado de que si llegan al hospital ya no van a salir, lo que es completamente un error, y ya cuando llegan al área de urgencias tienen anosmia (no huelen) y disgeusia (mal sabor en la comida) en algunos casos diarrea, náusea y vómito; cefalea y tos. Cuando llegan en ese orden de signos es obvio que se debe someter a prueba covid, pero por la pura signología podemos diagnosticar que es un cuadro respiratorio por covid y no por influenza.
Usted recibe pacientes covid en el área de Urgencias en el ISSSTE Torreón ¿Cómo llevan a cabo su trabajo? ¿Cuál es el ambiente ahí?
Cada guardia que hacemos nos encomendamos con una oración para tener fe de que Dios nos va a guiar y con la firme esperanza de no contagiarnos. Hay situaciones en las que tienes que 'entrar al toro' y el estado de ánimo de mis compañeros es de pánico, en otros casos es muy doloroso no poder recibir a un enfermo cuando estamos llenos en el hospital. De acuerdo con Ley Federal de Salud un hospital no puede negar el tratamiento a un paciente que tiene en peligro su vida (artículo 54-b), a menos de que el hospital compruebe que no hay recursos humanos ni materiales para atenderlo.
¿Ha tenido ganas de decir: hasta aquí?
Todos los días, todos los días que me despierto quiero pensar que esto es una pesadilla. Desde hace cuatro meses todos los días estamos con el mismo espíritu de presión, de ansiedad, de pánico que conjugados hacen que nos den ganas de decir ¡ahí nos vemos! que pensamos prefiero tener una buena vida a estar contagiado, pero luego te gana tu oficio, tu trabajo.
Nacimos para servir, escogimos esta carrera que es tan hermosa que te da tanto, tan buenos momentos que no los puedes cambiar por nada. Cuando lo haces con todo el cariño del mundo y con la finalidad se servir a los demás, no se te hace un trabajo pesado, el único problema es el pánico, el pánico de llegar a casa contagiado y contagiar a la familia.
¿Cuál es la lección de vida que le ha dejado la pandemia?
Es muy sencilla, vive tu día a día como si fuera el último, encomiéndate a Dios para que regreses sano a casa, cansado pero sano, sin ese temor de poder contagiar a tu familia, el trabajo tuvo que cambiar completamente porque el estar viendo pacientes (enfermos en general) frente a frente eleva 89% riesgo de contagio. Mi aprendizaje es disfrutar cada día de tu vida porque no sabes si habrá otro.
CALE