La arquidiócesis de Puebla participa en la Jornada de Oración por la Paz que se realizará durante el mes de julio ante los asesinatos, desapariciones y acciones de violencia que se presentan en el territorio mexicano.
Ante la convocatoria que realizó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) ante el clima de inseguridad que se vive en el país y luego del doble asesinato de los sacerdotes de la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús, Javier Campos y Javier Mora, además del guía turístico Pedro Palma, en el templo de la comunidad de Cerocahui, en el estado de Chihuahua, el pasado 21 de julio, la arquidiócesis poblana se suma a las acciones de oración.
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En el territorio diocesano que encabeza el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, en las misas que se celebrarán el próximo 10 de julio, se hará memoria de todos los sacerdotes, religiosos y religiosas que han sido asesinados en el país y se ofrecerá la intención de la eucaristía por la vida.
De forma adicional, como lo recomendó la CEM, se buscará que en los templos se coloquen fotografías de los sacerdotes y religiosas que dedicaron su vida a los servicios católicos y que fallecieron de manera violenta.
A lo largo del mes de julio, en la arquidiócesis de Puebla se celebrarán misas y se realizarán oraciones comunitarias en lugares significativos que representen a todas las personas que han desaparecido o sufrido una muerte violenta, sean homicidios dolosos, feminicidios, activistas sociales o cualquier otra persona en situación de exclusión o vulnerabilidad.
En los templos poblanos, como signo profético de la Iglesia, en las misas del día 31 de julio, los sacerdotes, religiosos y religiosas, así como los creyentes, pedirán por los victimarios, se orará por sus vidas y por la conversión de sus corazones.
De forma adicional, la arquidiócesis de Puebla solicitará a “cada congregación religiosa o parroquia que defina acciones a emprender para abonar a este camino para la paz, como son horas santas, procesiones por la paz o mensajes al pueblo de Dios”.
En su momento, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, llamó a todos los sectores de la sociedad a trabajar de manera conjunta para detener la ola de violencia que está creciendo en el país y en el estado.
Resaltó la importancia de que cada persona, desde su área de influencia, trabaje e impulse acciones en busca de construir un ambiente de paz ante las diferentes complicaciones que enfrentan las familias poblanas.
“Ante toda la situación que estamos viviendo de violencia, de inseguridad, esta ola que vive tremenda, el país, nosotros tenemos que ser portadores de paz, mensajeros de paz. Cuando en verdad acontece la paz, esta presencia amorosa, divina, necesariamente genera relaciones fraternales. Entre los seres humanos necesitamos de estas relaciones fraternas”, expresó Sánchez Espinosa.
En cada misa que encabeza el arzobispo de Puebla, se hacen oraciones especiales por las personas que perdieron la vida en medio de actos de violencias; además, se pide quienes están reportados como desaparecidos y por sus familias.
AFM