Los cierres carreteros por parte de damnificados de las inundaciones ocurridas la semana pasada, extendieron el semáforo naranja en Tabasco ante un posible rebrote de contagios de covid-19, anunciaron autoridades del estado.
“Cuando menos hasta el 15 de noviembre Tabasco va a seguir en semáforo naranja hasta en tanto no haya ahorita, 40 días de estabilización de la curva, ahora tememos que pueda darse algún rebrote por las aglomeraciones de gente a raíz de las inundaciones, entonces vamos a esperar”, dijo el gobernador del estado Adán Augusto López durante una visita en Villahermosa.
Aunque el gobierno Federal incluyó a Tabasco el pasado 9 de octubre en semáforo amarillo, el mandatario estatal, decidió mantener dos semanas más el semáforo naranja, fechas en las que sobrevino la emergencia por lluvias e inundaciones que remataron con aglomeraciones por bloqueos en diversos puntos del estado.
En este sentido, López Hernández recomendó a los tabasqueños que continúen “conservando” la sana distancia, el uso de los cubrebocas y las medidas sanitarias para seguir conteniendo las cifras a la baja.
Por su parte, la secretaria de Salud en Tabasco, Silvia Roldán Fernández, estimó que será en unos 14 días cuando se reporten los primeros casos por rebrote de covid-19 tras movilizaciones que familias afectadas realizaron por los daños que dejaron inundaciones.
"El primer día que se empezó a juntar la gente en Villahermosa, fue el día más difícil, porque había muchos sin cubrebocas, sin cuidados, adultos mayores, niños, vendedores ambulantes, todo (…) cada paciente deja 30 personas contagiadas. Ellos estaban todos juntos. ¡De que seguramente vamos a tener un rebrote en 10-14 días, es una pena!”, dijo esta mañana la funcionaria en una estación de radio en la ciudad de Villahermosa.
Silvia Roldán dijo que, por ahora, la entidad mantiene cifras bajas en contagios, muertes y hospitalización debido a la conciencia de la población, el trabajo de campo de los trabajadores de la salud, y al conocimiento de médicos sobre cómo combatir al virus.
Advirtió que cualquier descuido minúsculo en Tabasco se puede multiplicar la infección de nueva cuenta.
"Hemos tenido más del 80 por ciento de disminución en casos, en hospitalizados y hasta en defunciones. Esto no quiere decir que ya se acabó. Esto es tan increíblemente sensible que una fiesta nos puede poner un brote. Cada caso habla de 30 personas que vamos dejando contagiadas", remarcó.
Sobre los muestreos, la Secretaría de Salud informó que disminuyeron porque la población y casos sospechosos, se negaron a realizarse los estudios y no por falta de cobertura o de acción de las autoridades sanitarias.
"Al principio, la gente estaba muy desesperada porque le tomáramos una muestra. Tomábamos entre 300 a 700 muestras diarias, con la idea de abrirnos y detectar a la mayor cantidad. Hoy los contactos nos cuestan trabajo que se quieran tomar la muestra. Ya no quieren tomársela", sostuvo.
Para evitar aglomeración de tabasqueños e infecciones por el virus mortal, Roldán Fernández anunció el cierre de todos los cementerios del estado el 1, 2 y 3 de noviembre.
ledz