El aumento de enfermedades del corazón en México, no es solo problema de gente mayor. Las cardiopatías de origen congénito (que son malformaciones presentes al nacer) también se han disparado y hoy constituyen una de las principales causas de muerte durante el primer año de vida.
"La incidencia de mortalidad cardiovascular en población infantil es del 15 por ciento y dentro de ese porcentaje la mayor parte es por enfermedades congénitas y hereditarias", comentó el cardiólogo Luis Manuel Espinosa Castillo, vicepresidente de la Asociación Médica de Jalisco, Colegio Médico, A.C. De hecho, las cardiopatías son las enfermedades congénitas más frecuentes. Y ningún otro defecto de nacimiento impacta tanto en mortalidad de menores de un año.
De acuerdo con el entrevistado la mayoría de los niños que nacen con malformaciones del corazón no tienen agregados otros defectos de nacimiento. Aunque algunas cardiopatías congénitas sí pueden ser parte de síndromes genéticos y cromosómicos, como el síndrome de Down.
Las enfermedades congénitas del corazón son alteraciones en el funcionamiento y estructuras del corazón que pueden presentarse en las válvulas, en las paredes o en los vasos que llevan el flujo sanguíneo hacia este órgano (transposición de los grandes vasos es ejemplo de este defecto, uno muy común).
Las cardiopatías congénitas se clasifican en las de tipo cianótica y no cianótica. Las primeras ocasionan niveles bajos de oxígeno en la sangre y por tanto suele presentarse una coloración azulada (cianosis). Este trastorno obedece a que la sangre que circula a través del corazón, ya desoxigenada es bombeada hacia el cuerpo sin pasar a través de los pulmones a recoger oxígeno y al haber menos oxígeno en el cuerpo la piel puede lucir esta coloración.
"Son las mamás las que con buen ojo reconocen los síntomas: si el bebé se pone moradito después de alimentarlo, si parece que se fatiga, si tiene palpitaciones de forma irregular. Sucede muchas veces que van con el médico y éste les puede decir que el niño está normal, que no pasa nada y ellas insisten, si ni lo habían considerado los doctores les mandan a hacer estudios que confirman las sospechas maternas", relató el especialista, tras señalar que sin embargo se trata de enfermedades "fáciles de diagnosticar, con el simple estetoscopio y la historia clínica", explicó Espinosa Castillo.
Agregó que por lo general se trata de defectos en las válvulas cardiacas; pero otras anomalías del corazón que ocasionan cianosis son la coartación o interrupción completa de la aorta, la anomalía de Ebstein, el síndrome de corazón izquierdo hipoplásico, la tetralogía de Fallot, el drenaje venoso pulmonar anómalo total y la transposición de los grandes vasos.
¿Por qué se forman los bebés con estos defectos? Algunas de las causas de las cardiopatías cianóticas incluyen a exposición a químicos, síndromes cromosómicos y genéticos (por ejemplo el síndrome de Down, trisomía 13, síndrome de Turner, síndrome de Marfan y síndrome de Noonan), haber padecido rubéola durante el embarazo, diabetes gestacional mal controlada, consumo de drogas psicoactivas ilícitas o de medicamentos no autorizados durante el embarazo.
Por lo tanto, muchos de los defectos de nacimiento del corazón se pueden prevenir un adecuado control prenatal y evitando la madre conductas de riesgo como el consumo de alcohol y drogas. De ahí el interés de los especialistas como el vicepresidente de la AMJ y de estrategias como el Día Internacional de las Cardiopatías Congénitas (que se conmemoró el pasado 14 de febrero), por difundir información para que la población las conozca.
El tratamiento para las anomalías en el corazón es corregirlas a través de cirugía, lo más pronto posible tras el diagnóstico, sin importar si son bebés pues en algunos casos la muerte es inminente en los primeros meses. "Hay que mencionar también que muchas enfermedades congénitas se pueden curar sin necesidad de cirugía abierta, como es el caso de la persistencia del conducto arteroso, cuando dos arterias que se deben separar en el nacimiento siguen juntas. Ésta se puede tratar a través de un catéter. Otro ejemplo es cuando se presenta coartación de la aorta, la arteria más importante que sale del corazón".
La decisión de operar dependerá del tipo de cardiopatía congénita y a veces lo recomendable es tratar al bebé con fármacos de forma provisional y en espera de que tenga mayor edad para la intervención definitiva, dijo el especialista.
Por otra parte, mencionó que hay padecimientos del corazón congénitos que pasan desapercibidos, pero luego se presenta la muerte súbita de jóvenes, generalmente deportistas que desarrollan grandes esfuerzos físicos y tienen un paro cardíaco. "Se dice que es una muerte inexplicable, pero no es así, había detrás una enfermedad congénita o hereditaria", dijo.
Por tanto, el cardiólogo opinó que los casos de muerte súbita deben ser analizados para determinar el origen. "La causa de muerte no sería el paro del corazón sino la enfermedad, pero la realidad es que ante una muerte sin motivo aparente, el médico es dado a declarar infarto y a no especificar", puntualizó.
El doctor Espinoza agregó que disponer de estudios genéticos permitiría una detección más oportuna de enfermedades cardiacas, pero éstos en México poco se practican.
Claves
Cardiopatía congénita
Las cardiopatías congénitas son malformaciones del corazón o de los grandes vasos sanguíneos que se presentan antes del nacimiento.
Es la anomalía congénita más común.
La cardiopatía congénita causa más muertes en el primer año de vida que cualquier otro defecto de nacimiento.
Durante el año 2016, en México fallecieron 3,372 menores de un año por cardiopatía congénita.
La cardiopatía congénita puede ser cianótica (coloración azulada producto de una relativa falta de oxígeno) y no cianótica.
Algunas medidas de prevención de este defecto incluyen: control prenatal, evitar el consumo de alcohol, drogas y medicamentos no autorizados y manejo adecuado de la diabetes gestacional.
El tratamiento por elección para las malformaciones del corazón es la cirugía.
Fuente: Dr. Luis Manuel Espinosa Castillo, cardiólogo y vicepresidente de la Asociación Médica de Jalisco, Colegio Médico, A.C.
SRN