El feminicidio de Mariana de Lourdes Sánchez Dávalos, pasante de medicina de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), ha causado indignación nacional, unido y movilizado a estudiantes de todo el país, pero sobre todo a tres colectivas feministas universitarias que han alzado la voz por ella en la exigencia de justicia desde el hallazgo de su cuerpo el 28 de enero de 2020.
Brujas, Neuronas y Dalias, colectivas feministas universitarias de la UNACH, dieron un paso más allá de su lucha individual, al crear espacios de encuentro donde las universitarias, son capaces de trasladar la indignación a un trabajo entre colectivas para luchar por la justicia de todas mujeres que han sido víctimas de violencia de género en la institución, para evitar que sigan existiendo más casos como el de Mariana.
La joven de 24 años, era originaria de Tuxtla Gutiérrez, egresó como médico cirujano, brindaba atención médica desde hace varios meses en la clínica de Ocosingo, en la Selva de Chiapas. A finales del año pasado, la pasante había señalado a un compañero por agresión sexual, la denuncia fue desestimada por la Fiscalía General del Estado (FGE) y por la directora de la clínica donde laboraba quien solo le ofreció un mes de “vacaciones”. Tras exponer el caso, intentó salir de la comunidad, pero no lo logró.
En entrevista para MILENIO, las tres colectivas universitarias detallaron las acciones que han emprendido dentro de la UNACH, para que el feminicidio de Mariana no quede impune ya que la institución cometió omisiones en su caso, una de ellas fue no dar respuesta a su solicitud de cambio de lugar para realizar su servicio.
A través de movilizaciones y un pliego petitorio Brujas, Neuronas y Dalias exigen que se sancione a las personas involucradas en el proceso de denuncia que Mariana inició y que no fue atendido con inmediatez.
“Nuestro deseo es justicia: castigar a los responsables de la muerte de Mariana, garantizar la seguridad de nuestros compañeros de servicio social, además establecimos peticiones encaminadas a proteger a nuestras compañeras a nivel UNACH”, explicó Helena Morales, de la colectiva Neuronas.
De manera que dentro las principales exigencias del pliego petitorio se encuentran una disculpa pública y destitución de la directora de la Facultad de Medicina de la UNACH, Ana María Flores, el encargado de Servicio Social, Carlos Alberto López, así como de Enrique Pimentel Gonzáles, abogado general de la Universidad y de Sergio Serrano Alfaro encargado de la Dirección de la Defensoría de Derechos Universitarios.
Otra exigencia importante dentro del pliego petitorio es la creación, aprobación y aplicación de un nuevo Protocolo de Acción contra el acoso, donde participen las colectivas universitarias y órganos capacitados en perspectiva de género, conformadas por alumnas de la institución. Del mismo modo, piden que se capacite y evalúe al personal docente de la UNACH en perspectiva de género como requisito indispensable para asegurar su permanencia en la institución.
A este respecto, Mafer Ramírez de la colectiva Dalias explicó que el actual protocolo contra el acoso que tiene la Institución es deficientes pues solo contiene un diccionario de términos relacionados al tema, lo que impide que las alumnas defiendan sus derechos y se protejan contra su agresor.
“Es para no creerse, el protocolo es un diccionario de términos, no sirve para protegerte, la UNACH no cuida a sus alumnas, prefiere proteger abusadores a violadores dentro de su institución, qué vergüenza pertenecer a una universidad que ante este tipo de casos no tiene ninguna conciencia de las necesidades de servir como se jacta”, dijo Mafer.
Sin embargo, la respuesta de las autoridades universitarias ha dejado mucho que desear. Una de las medidas tomadas por la Institución fue convocar a la comunidad estudiantil a mesas de reflexión, que para estas colectivas, son una simulación, pues no se ha resuelto el pliego petitorio.
“Estamos en espera de que se nos atienda, no hemos tenido ninguna respuesta, ningún tipo de contacto sobre este pliego, si es necesario volver a movilizarnos lo haremos las veces que sean necesarias hasta que seamos escuchadas”, señaló la integrante de la colectiva Dalias.
No solo la denuncia de Mariana quedó sin respuesta, otros casos de abuso sexual, acoso y hostigamiento siguen en espera de justicia en la UNACH. De acuerdo con Liliana Flores, integrante de la colectiva Brujas, antes del caso de Mariana se realizaron actividades de denuncia en la Institución como el muro de la vergüenza y tendederos del acoso donde han recabado por lo menos 330 denuncias relacionadas con intento de violación, acoso y abuso de poder.
Algunas de estas denuncias han sido interpuestas ante la Defensoría de Derechos Universitarios de la UNACH, que la tienen en trámite porque las reconoce como anónimas, por lo que argumenta no puede proceder.
“Este hartazgo sistemático, que no se han reconocido estas denuncias por el hecho de ser anónimas y las omisiones ante el caso de Mariana son parte de lo que nos involucró y nos hizo unirnos como mujeres feministas en esta lucha colectiva para exigir justicia”, detalló Liliana.
Avances en el caso de Mariana
El pasado 6 de febrero, la Fiscalía de Chiapas detuvo “por su probable participación en el delito de abuso de autoridad” a Analí ‘N’, quien fungía como directora de la clínica de Salud de la comunidad de Nueva Palestina, donde prestaba su servicio Mariana.
Además, la Secretaría de Salud del Estado de Chiapas destituyó a Marianna Lazos Salgado, ha sido cesada como subdirectora de Educación y Enseñanza en Salud de la Secretaría de Salud del estado de Chiapas y Ana María Flores García, renunció a su cargo como directora de la Facultad de Medicina Humana, ambas acusadas de ignorar la denuncia de Mariana el año pasado.
Hasta el momento, Fernando Cuauhtémoc 'N', quien es señalado como la persona que acosó a la joven de 24 años y que en 2014 había sido acusado también de violencia sexual por otra mujer, se encuentra prófugo; elementos de la policía catearon, acordonaron y colocaron sellos en su vivienda para indicar que el inmueble es parte de la investigación de las autoridades.
ledz