Ocho playas de Baja California fueron cerradas en pleno periodo vacacional por Semana Santa. Las recientes lluvias, entre otros factores, contaminaron el mar en la Zona Costa del estado.
Las autoridades locales anunciaron el cierre de seis playas en Tijuana y dos en el municipio de Playas de Rosarito, pues se consideró que no son aptas para turistas.
El ayuntamiento de Tijuana instaló letreros a lo largo de todo el malecón, además, desplegó personal para evitar el ingreso a las playas, luego de que la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) informó que el agua rebasaba los límites de 200 enterococos por cada 100 mililitros de agua.
El titular de la Secretaría para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua de Baja California (Seproa), Víctor Amador, indicó que lo anterior se debe a que todavía no está lista la planta de tratamiento de aguas residuales de San Antonio del Mar, que será la que contribuya a mitigar este problema en octubre de este año.
Por otro lado, mencionó que la época invernal también afectó, ya que las precipitaciones arrastran desechos y contaminantes a las zonas costeras.
A pesar de los esfuerzos realizados por las plantas tratadoras en municipios como Rosarito, la contaminación proveniente de arroyos que atraviesan rancherías y establos sigue siendo un desafío importante.
Ante esta situación, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, expresó su compromiso de combatir la contaminación de las playas en la región.
ROA