Para Luz Elisa Velázquez de San Pedro, Coahuila, los días santos han pasado desapercibidos para mucha gente, no porque quieran, sino porque la contingencia por el coronavirus, a sido cruel para la humanidad e incluidos en ella, los sampetrinos que son gente de Fe, de devoción y de mucho sentimiento con sus religiones y con sus creencias.
Luz, vecina de la Colonia Emiliano Zapata, es comerciante de pan y dice que cada año, acude a la Parroquia de San Pedro Apóstol para vender, ya que el pan que ella hace y vende, es el que los fieles, bendicen en jueves santo, junto con los cirios.
Con lágrimas en los ojos, Luz ve con tristeza la soledad de la Parroquia, algunas personas, pasan y compran su pan, pero dice que no es como en otros años, cuando los días santos se vivían con alegría, con devoción y Fe.
"Es imposible contener el llanto, no puedo creer que nuestra Parroquia esté tan sola, me da tanta tristeza ver la situación en la que nos encontramos, pero hay que echarle ganas y tener Fe, esto no nos puede vencer y se, que Dios nos ama y nos bendice a través de su palabra".
Por último, Luz confía en que saldrán de esta situación, menciona que su economía también se ha visto mermada, pero lo que más siente, es ver como esta pandemia a destruido las actividades religiosas en estos días, pero lo que sí, asegura que el mal no nos derrotara, porque mientras haya Fe, hay esperanza.
CALE