En Coahuila se tiene un registro de 130 suicidios en lo que va del año, de ellos 107 son hombres y 23 mujeres, la edad promedio se ubica entre los 21 a los 40 años, siendo La Laguna donde se concentra la mayor cantidad y le sigue la Región Sureste.
En base a las estadísticas de la fiscalía general de justicia en Coahuila (con corte al 12 de junio), se tiene el desglose por ocupación y en 64 de estos casos eran empleados, 55 de ellos o ellas con secundaria terminada y la prevalencia por estado civil en prácticamente 30 por ciento de los casos eran solteros.
La Ley de Prevención de Suicidios para el estado de Coahuila establece en uno de sus párrafos que la OMS sostiene que “la tasa de mortalidad por suicidio es un indicador de la meta 3.4 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible: De aquí a 2030, reducir en un tercio la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles mediante su prevención y tratamiento, y promover la salud mental y el bienestar”.
Siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, la Ley de Prevención de Suicidios de Coahuila, busca que todo aquel ciudadano coahuilense que haya intentado suicidarse sea atendido de manera inmediata en el Centro Estatal de Salud Mental de la entidad, sin importar en qué municipio se encuentre, ya que las citas que se dan en los Centros Integrales de Salud Mental (CISAME), tienden a ser tardadas, además de que los mismos no cuentan con el personal suficiente para llevar a cabo consultas de personas con tendencias suicidas.
“Es urgente que el Estado garantice la salud mental de las y los coahuilenses, y es preciso que se establezcan las bases que aseguren la atención médica inmediata a aquella persona que haya fallado en su intento de suicidarse, siendo esta, una oportunidad de vida y el parteaguas para la disminución de los hechos mortales por suicidio en la entidad”, dice textualmente uno de los párrafos de la Ley Estatal.
Año 2020, mayor cifra hasta hoy
La estadística de la Fiscalía del Estado señala que en 2020 se registraron un total de 283 suicidios y en 2021 el número fue de 281 (tres menos) y en lo que va del año 2022 hasta el momento suman 130.
En el comparativo por regiones, en 2020 con 283 suicidios, la Región Sureste registró 83 eventos mientras que en La Laguna 76; en este año, fue la primera (Región Sureste) la que registró la mayor cantidad.
En 2021 con 281 eventos en la Región Sureste se registraron 90 casos mientras que en la suma de todos los municipios de La Laguna (Región Laguna I y Región Laguna II) un total de 89 suicidios.
Y en lo que va de 2022 prácticamente a la mitad del semestre en la Región Sureste se tienen contabilizados 39 suicidios y en La Laguna un total de 44, es decir, cinco más.
Cada vez son personas de menor edad
A la par hombres y mujeres Rosa Ofelia Sisbeles Alvarado, directora de la Unidad de Control y Gestión de la Fiscalía de Investigaciones Especializadas Atención y Protección a Víctimas y Testigos de la Fiscalía General del Estado, señala que cada vez son de menor edad entre los 19 y 39 años los que intentan o cometen suicidio y pese a que son más hombres, los casos están a la par entre hombre y mujer.
“En Coahuila lo que hemos visto sobre todo en Saltillo, es que los intentos si son más a la par entre hombres y mujeres pero son más letales los primeros (hombres) y son en una mayor cantidad y tiene que ver con el hecho de que a los hombres no se les permite expresar tan fácilmente sus emociones, acudir a terapia psicológica o pedir ayuda o apoyo. Ahora, ya tenemos contabilizados en la estadística los intentos que era algo que no se tenía hace cuatro años y ello es muy importante porque permite focalizar acciones sobre el fenómeno del suicidio. Los números entre los años 2020 y 2022 se van manteniendo prácticamente”.
Suicidios se concentran en zonas con mayor índice de desarrollo económico
Dijo que a nivel nacional e internacional, en las ciudades con un mayor índice de industrialización y desarrollo económico se da más este tipo de conductas suicidas, de ahí que en La Laguna y la Región Sureste, se concentre el mayor número de suicidios.
La primera alerta: cómo detectar intentos de suicidios
Los padres de familia deben estar muy alertas del comportamiento de los jóvenes y adolescentes o preadolescentes y cuando se observen cambios de conducta deben de encender sus alertas.
Otra de las conductas que deben de llamar la atención es que se aislen, que cambien su estilo de vida, si comían mucho antes y ahora poco o viceversa; si dormían poco y ahora mucho.
Los cambios repentinos y abruptos de su conducta tienen que llamar mucho la atención a los padres ya que pueden ser manifestaciones de estrés o algún tipo de conducta violenta que se está cometiendo hacia él o ella.
También hay que estar alertas cuando abandonen actividades que antes les gustaba realizar pero también que se desprendan de cosas que eran importantes para ellos como juguetes, colecciones y expresiones, tales como: “si me voy muy lejos se solucionarían los problemas” o “si no estuviera se acabarían los problemas”, ahora con las redes sociales analizar sus publicaciones si encuentran en ellas palabras de desaliento o que vayan en contra de la vida.
“No se debe de tomar a la ligera, no se debe de pensar que es chantaje emocional ya que la mayoría de las personas que se suicidaron trataron de buscar ayuda si no abiertamente a través de mensajes o acciones y en estos casos el mensaje llegó claro y es que manejamos muchos mitos sobre el suicidio”.
Dijo que algunas de las causas detectadas hasta el momento son violencia hacia la persona, el hecho de no saber manejar conflictos de pareja es otro motivo y el consumo de alcohol y droga.
Los padres de familia, amigos o conocidos que se encuentran alrededor de la persona con ideas suicidas pueden canalizarla con un psicólogo o psiquiatra y en caso de que haya poco acceso por la capacidad económica puede acudir al Centro Integral de Salud Mental en la Región Laguna y también a la línea de atención de la Vida también en los DIF municipales y los Centros de Atención Integral de la Familia del DIF estatal, pero también existen asociaciones de apoyo.
¿A dónde pedir ayuda?
Para poder pedir ayuda cuando haya un tema de ideas suicidas o intento de suicidio se puede llamar al 911 en donde se canalizará para el área correspondiente.
Cuidar los contenidos de las redes sociales
Desde la perspectiva de la terapeuta clínica, Milagros Castillo, es importante que se cuiden los contenidos en las redes sociales a la que tiene acceso el niño, el adolescente o el joven, puesto que se pueden encontrar mensajes de soledad incluso de ideas suicidas.
También es vital que se validen las emociones desde pequeños para que sea fácil expresar cualquier situación emocional en sus distintas etapas. Explica en torno al comportamiento de la persona que tiene una idea suicida (que a muchos les ha pasado en algún momento por la cabeza) que la alerta roja se enciende cuando se busca el “cómo hacerlo”.
“Es entonces cuando ya existe una seria intención. Se tiene la mala idea de que los intentos son para llamar la atención pero realmente lo hacen porque necesitan ayuda, los intentos suicidas son pedidos de ayuda a gritos de que algo no está bien. Si la persona busca acabar con su vida es definitivamente por que algo le pasa”, afirmó la especialista.
Desde pequeños se deben de validar las emociones cualquiera que estas sean y guiarlos en cómo poder expresarlas, pero al final también es mucho la observación de lo que existe en su entorno.
“Cuál es el contenido que mi hijo está viendo en las redes sociales, en youtube, en tik tok. Es recomendable revisar el contenido al que tienen acceso ya que en muchos de estos videos existen mensajes con sentimientos de soledad, de que solos no podemos. También sobre los videojuegos, hay que ayudarles a digerir porque a lo mejor no se le puede quitar del todo pero sí medir el tiempo. Hay que preguntarles cómo se está interpretando”.
Las modificaciones en la conducta son también una señal de alerta para los padres de que algo no está alcanzando a digerir el menor, el joven o el adolescente.
“Vale la pena preguntar pero siempre preguntando desde el amor ya que en ocasiones llegamos a ser muy intrusivos, pero con tonos nada empáticos. Se trata de abrirles la puerta de que si algo les pasa nosotros como padres los podemos escuchar. Nunca decirles ¿por eso te enojaste, que delicado? Sobre todo cuando un niño dice estarían mejor sin mí es sin duda algo que se debe de atender inmediatamente, eso hay que preguntarlo tal vez no en ese momento, sino después. No es natural que un niño diga eso”.
aarp