Jovana Dibanhi Aguilar Pérez cumplió 8 meses desaparecida este viernes 25 de febrero. Su madre, María Guadalupe Pérez Ayala, señala que no hay avances ni resultados concretos por parte de la Fiscalía General de Coahuila para dar con su paradero.
En entrevista para MILENIO, destaca omisiones de parte de la autoridad entre las que está el que no aplicaron en su momento el Protocolo Alba cuando fue reportada la ausencia de la entonces joven de 22 años de edad.
“Les digo a las madres que tengan a sus hijas desaparecidas que exijan ese protocolo, pues en mi caso no lo aplicaron y ahora según ellos hacen diligencias, pero no tienen una línea. Mi hija no desapareció de la nada, sino de donde vivía”.
Recuerda que en un comienzo apenas y le mostraron el expediente abierto, pero hasta noviembre supo que podía exigirlo gracias a la asesoría que recibió del Centro de Derechos Humanos Fray Juan de Larios.
“Les dije que me prestaran el expediente y me cuestionaron para qué lo quería ver. Ya son 8 meses y no me saben dar razón y nadie de nosotras pedimos estar en esta situación”.
Dice que en su momento ella tuvo que proporcionarles información y llevar contactos cercanos de su hija para que declararan ante la Fiscalía, pero también la cuestionaron que tardó en buscarla.
“Yo estaba en cama enferma, llegaron mis primas y me dijeron que no la encontraban desde hace dos semanas. Hasta ahora sé que hay un protocolo que no aplicaron porque hay tiempos y ahora me dicen que me tardé en enterarme de que desapareció mi hija”.
Derivado de la falta de resultados, Pérez Ayala ha presentado quejas ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos y buscado orientación con diversos colectivos como Madres Poderosas, Fuundec y Grupo Vida para conocer más sobre los derechos que tiene como víctima. “En la Fiscalía me dicen que no puedo estar en más de una, que ya no debo de andar buscando y me debo de estar quieta”.
La madre de Jovana Dibanhi afirma que no dejará de insistir hasta que haya resultados por parte de la autoridad y de momento ya está en proceso de recibir asesoría en materia jurídica por parte de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAV).
“Yo no sé si mi hija está secuestrada, la comercializaron o le quitaron su vida. Me han ocultado información y quiero que quede registrado que no veo avances en el caso, pues dicen que lo que tienen no sirve y no pueden actuar”, añade.
EGO