El pasado domingo se reportó el aseguramiento de tres oseznos y una osa, en una comunidad al sur de Saltillo, luego de que el tren alcanzara a la madre de los animales, por lo que fue necesario su traslado a las instalaciones del Museo del Desierto, donde especialistas le brindaron atención médica hasta este jueves, que se reportó el fallecimiento.
Los oseznos que se encuentran a resguardo de la institución, no volverán a su hábitat natural y se les busca un lugar donde puedan permanecer a salvo, ya que por la edad que tienen no es seguro reintroducirlos en la sierra.
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Por otra parte, sobre lo ocurrido en el municipio de Castaños, donde un osezno murió a manos de pobladores del lugar, el director de fauna del Museo del Desierto, Fernando Toledo, lamentó que aún existan este tipo de comportamientos por parte de las personas que aparecen en las fotografías y que se observan sonriendo, al señalar que los osos no buscan atacar a las personas y sólo responden ante acciones de los propios ciudadanos.
“Son cosas que tienen que cambiar y espero que las autoridades actúen con todos los involucrados y estoy seguro que lo van a hacer, nos queda bien claro en estos casos quienes son los animales, quienes son los que estamos interfiriendo con la vida natural, recordemos que estamos en un área donde habita mucha fauna silvestre, donde habita el oso negro”, sentenció.
Explicó que lo que se tiene que hacer es aprender a vivir con este tipo de animales y no tolerar ningún tipo de maltrato, sin importar cuál sea la especie.
“Es muy común que matan a las serpientes y ahí no suena tanto, pero tenemos que tener el mismo respeto para una serpiente, que para un oso o un bisonte, yo espero que las autoridades actúen y que esto no se repita porque esto deja muy mal al estado”, afirmó.
El director de fauna del Museo del Desierto agregó que uno de los principales errores de la población es tratar de alimentar a los animales pensando que tienen hambre, ya que con esta acción se les va aleccionando sobre la forma en la que pueden obtener comida, cuando estos animales tienen una dieta omnívora y no requieren que los humanos traten de alimentarlos.
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