En el edificio del Poder Legislativo de Yucatánse efectuaron una serie de pláticas y ponencias por impartidores de justicia y psicólogos para sensibilizar a la sociedad respecto a las consecuencias físicas, emocionales, económicas y materiales de la violencia vicaria.
Víctor Hugo Lozano Poveda, diputado presidente del Congreso yucateco, explicó que, aunque se tiene conocimiento de violencia en contra de mujeres desde hace tiempo, actualmente está siendo combatida para evitar que sus hijos sean utilizados contra ellas.
“Esto no termina con la aprobación, da pie a que se cuente con las herramientas para trabajar en equipo, para trazar las estrategias que nos lleven a erradicar esta violencia, que nos lleve a que todo aquel que use a sus hijos para violentar a una mujer lo piense, porque en Yucatán ya es ley y es apenas el principio”, dijo Lozano Poveda.
Por su parte, el magistrado del Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa del Decimocuarto Circuito, Jorge Wynter García, recordó que hace décadas, en las leyes de la Ciudad de México (entonces Distrito Federal), cuando una mujer era infiel a su esposo y era asesinada, la justicia era casi nula.
“La mujer infiel se le podía matar, siempre y cuando, eso sí, fuera en ese momento, después ya no porque ya estaba razonado, obviamente ese artículo fue derogado, posteriormente empezamos a encontrar la incorporación de la violencia familiar, a los niños, el daño a la esposa sin distinción, cualquiera de los dos progenitores”, recordó Wynter García.
Detalló que, al paso de los años, la legislación mexicana fue evolucionando, hasta la actualidad, como los términos de violencia vicaria y feminicidio, como ejemplo.
Sin embargo, las situaciones de alienación parental es preocupante, ya que se utilizan a los hijos de la pareja para agredir principalmente a ellas.
“Los padres, la madre, el padre, pueden alinear a los hijos para que estén en contra del otro progenitor, en algunos estados constituyen el delito”.
Detalló que cuando se juzga a una mujer debe ser con perspectiva de género: “en este caso, de la mujer para comprender lo que está sucediendo, hemos tenido delitos muy fuertes, personas cuando tienen a su hijo, lo han matado, pero hay que ver en que comisiones, a cielo abierto, desesperada, rechazo social, en fin, son condiciones que se tienen que entenderse y eso es tiene que juzgar con perspectiva de género”.
Recordó que, en décadas pasadas, se juzgaba a la mujer de manera muy fría: “mato a su niño y vamos a condenarla 20, 30, 40 años de cárcel y así era, era normal, yo pienso que lo normal ya vienen lo que se está haciendo, vamos a normalizar la situación que no se le puede tocar a una mujer en cuestión de relevancia social”.
Por su parte, la jueza Tercero de Distrito del Estado, Karla Domínguez Aguilar, dijo en el foro que las expresiones de violencia de género, utilizando a los hijos de la pareja en algunos casos, se presentan aspectos de estereotipos y discriminación.
La jueza detalló que el término de violencia vicaria es: “no toda violencia contra los hijos es violencia vicaria, pero sí toda violencia vicaria es violencia contra los hijos”.
Y aunque la Corte Interamericana de Derechos Humanos no tiene registros de casos de violencia vicaria como tal, pero sí de violencia en general, es un tema preocupante para las autoridades internacionales.
Domínguez Aguilar dijo que en encuestas realizadas confirmaron actos violentos dentro de los núcleos de la familia.
“Las relaciones del poder en el interior de los hogares generan la victimización de géneros específicos, particularmente de mujeres, niñas, niños, adolescentes y personas mayores.
"El 43.9 por ciento de las mujeres encuestadas declaró haber vivido violencia por su actual o última pareja, violencia que inicia desde la relación del noviazgo”.
“La violencia en el núcleo familiar ha constituido un tema difícil de abordar porque su reconocimiento rompe con la idea del entorno familiar, es de seguridad para sus miembros, se trata de un problema social, complejo, multifacético que se vincula con otras situaciones de vulnerabilidad como son la diversidad sexual, la clase social, el medio educativo”, finalizó Domínguez Aguilar.
JLMR