Las aguas negras que se descargan en las áreas verdes que rodean al fraccionamiento Urbi Villas del Rey, a las orillas de Cancún, Quintana Roo, es un problema derivado de que el constructor no concluyó la infraestructura de drenaje, un pendiente que tienen que resolver las autoridades e instancias financieras, aseguró la empresa Aguakan.
“El origen del problema que persiste a la fecha es que Urbi Villas del Rey es un fraccionamiento donde el desarrollador incumplió sus obligaciones de introducción de los servicios tal y como indicaba la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano del Estado de Quintana Roo, así como las condicionantes de la factibilidad de servicio”, explicó la empresa en una carta.
Luego de que MILENIO dio a conocer que vecinos de esa unidad habitacional denunciaron que no existe infraestructura de tratamiento de aguas residuales y que Aguakan, la empresa privada que les presta el servicio de agua potable, se desentendió del drenaje, la compañía respondió que ese problema no le compete.
“Aguakan ha participado activamente en mesas de trabajo con propuestas para apoyar a los vecinos en su situación actual y para encontrar la manera de resolver definitivamente este problema, cuya situación depende fundamentalmente de que las autoridades e instancias financieras logren un acuerdo para financiar la infraestructura con la que el desarrollador original incumplió y regularizar este complejo habitacional”, expuso.
Sin embargo, no aclaró si la competencia de lograr este acuerdo corresponde a las autoridades del municipio de Benito Juárez o del gobierno del estado.
Desde 1993, Aguakan reemplazó a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) del estado para prestar esos servicios en el municipio de Benito Juárez (Cancún) e Isla Mujeres y posteriormente en Puerto Morelos, cuando se separó de Benito Juárez, y en Solidaridad.
“Las obras de infraestructura de drenaje para el desalojo de las aguas residuales no fueron concluidas acorde a los proyectos que le fueron aprobados al Desarrollador Urbi, quedando sin construir un colector, un cárcamo y un emisor a presión de aguas negras”, añadió respecto del fraccionamiento en cuestión.
Por lo anterior, detalló “la infraestructura de abasto y distribución de agua, así como la de drenaje sanitario no fue entregada a la Comisión de Agua del Estado de Quintana Roo y por tanto Aguakan tampoco la recibió para su operación y mantenimiento”.
Es por ello, que Aguakan no cobra el servicio de drenaje, alcantarillado y saneamiento en ese fraccionamiento.
No obstante, Aguakan confirmó que, aunque no ha recibido formalmente la infraestructura de agua potable, esa sí la utiliza y cobra en el recibo mensual por ello, como MILENIO lo dio a conocer.
“Los vecinos reciben el servicio de agua potable debido a que la empresa abastece de agua un cárcamo general del cual se distribuye a las viviendas regulares que actualmente cuentan con contrato”, afirmó.
Sobre las tuberías e instalaciones para el traslado de aguas residuales que no usa, porque no está completa, la empresa explicó que “la infraestructura de drenaje y saneamiento planificada por Aguakan en la zona, está preparada para recibir las aportaciones de agua residual del Fraccionamiento Urbi Villas del Rey, en tanto éste cumpla con las condicionantes de factibilidad señaladas anteriormente, para que las aguas sean tratadas previo a su retorno a los mantos acuíferos”.
MILENIO también dio a conocer que existen dudas entre los ciudadanos de Cancún respecto de la cantidad de aguas residuales que Aguakan trata para después reinyectarlas al subsuelo, pues según la información sobre la capacidad de sus plantas de tratamiento, sólo podría dar tratamiento al 30 por ciento, 912 litros por segundo, de los más de 3 mil litros de aguas negras que se generan en la ciudad.
La empresa respondió que una de las líneas estratégicas para el cuidado del medio ambiente se basa en la recolección y tratamiento del 100% de las aguas residuales que se generan dentro de la demarcación territorial de los municipios de Benito Juárez, Isla Mujeres, Puerto Morelos y Solidaridad a través de la operación de las 13 plantas de tratamiento de aguas residuales distribuidas en ellos.
Informó que ha invertido 3 mil 800 millones de pesos desde 1994 en infraestructura de agua potable y saneamiento y que en 2022 invertirá 700 millones más.