Martha tiene 55 años y resultó positiva al nuevo coronavirus SARS-CoV2, causante de la enfermedad covid-19.
Hasta el momento, desconoce donde se contagió, entre la gama de posibilidades está su área laboral, otra el propio IMSS, incluso el transporte de personal que utiliza. Ahora, no sabe si el decaimiento y temperatura que presentó se debió al virus, o por el sangrado de la úlcera gástrica que originalmente le habían diagnosticado un médico especialista.
En su internamiento en el área de sospechosos de covid-19, en el Seguro Social, dice que, las camas están solo separadas por una cortina, cuando tosían los demás, trataba de cubrirse con la cobija, vio morir a un enfermo luego de que comenzó a faltarle el aire y lo único que pudo hacer por él fue rezar.
“Fui a un médico particular a atenderme del dolor abdominal el 20 de mayo, él me diagnosticó úlcera gástrica con sangrado debido a ello, tenían que ponerme un suero y sangre además de realizarme estudios más especializados por ello me sugirió acudir al IMSS ya que en la medicina privada tendría un costo muy elevado que se podía pagar. En el trabajo me pidieron la incapacidad que extiende el IMSS, fui a mi clínica y me dijeron que solo me la darían por un día (incapacidad), que regresara a trabajar el lunes”, comparte vía telefónica.
El viernes 29 de mayo ya se sentía más mal, por ello es que acudió al IMSS 46 de Gómez Palacio, nuevamente en donde le realizaron toma de glucosa y presión, pero le dijeron que tenía temperatura elevada, uno de los síntomas de coronavirus por ello, si decidía quedarse a realizarle lo que le preescribió su médico particular, tendría que ir al área de sospechosos de covid-19.
“Le dije a mi hijo está bien, me quedo para que me hagan todos los estudios entre ellos los gástricos y si el requisito era la prueba covid pues no importaba. Nunca me imaginé la situación que viviría dentro, en donde solo puede ingresar el paciente. Primero me colocaron un suero, a las ocho de la noche del viernes me hicieron las pruebas luego, a pesar de que yo podía levantarme por mi propio pie al baño no me dejaron, me dijeron que tendría que usar cómodo pero no había papel así me dijeron que me tendría que quedar. Siento que no están ni en este momento preparados”, afirmó.
Dice que no hay condiciones higiénicas en el área de sospechosos de covid-19, cómo si es que el lavado de manos una acción indispensable para el combate a covid, no le daban ni papel, para cuando terminaba de ir al baño, nunca entendió tampoco por qué no le permitían ir por su propio pie, tampoco contaba con gel antibacterial, sanitizante ni manera de lavarse los dientes.
Llora mientras cuenta que, el sábado cuando se sentía muy mal, escuchaba a los pacientes tosiendo, el personal médico sí protegido pero los pacientes sospechosos no y ni siquiera, le habían confirmado que era positivo, sin embargo pensaba en el peor de los escenarios sobre todo cuando uno de los pacientes que se encontraba cerca de ella, tuvo una crisis respiratoria, le pusieron la mascarilla y ni 15 minutos duró cuando finalmente murió.
“Lo único que hice es una oración por él y otra por mi y a mi padre quien falleció en abril, le pedía también que me ayudara en esta situación y me entró una desesperación terrible, es que en el área de sospechosos si no estás contagiado te contagias. A los que confirman que sí son, se los llevan en una cama tipo cápsula a otra área donde están los confirmados”, afirmó.
Una doctora le dijo que estaba en condiciones buenas de salud, le sugirió que pidiera su alta voluntaria y así lo hizo pero no se le permitieron, no le daban los motivos, luego otro médico dijo que mis pulmones estaban mal.
“Siempre me dijeron que nadie de mi familia iba a preguntar por mí, eso no era cierto, mis tres hijos siempre han estado al pendiente. Yo no aguantaba más estar ahí, me sentía ya perfectamente bien físicamente, emocionalmente no. Uno de los enfermeros me hizo favor de comunicarse con mi familia y finalmente autorizan mi salida para recuperarme en mi casa, a él y a su compañero les agradezco ese gesto de bondad en medio de una situación tan difícil”, compartió.
Uno de sus hijos fue por ella, con los debidos cuidados la trasladó a su domicilio en donde la esperaba su hija con quien vive y quien insistió quedarse a cuidarla con los protocolos debidos.
“Le dije que se fuera con sus abuelos, se resistió y pese a las precauciones, mi hija salió positiva a covid-19 y no presenta síntomas, pero mi nieta vino hacía siete días a visitarme y otro de mis hijos, el más chico dice que se siente bien y que no se la ha querido hacer", afirmó.
Justamente este viernes, le dijeron que tendría que hacerse nuevamente la prueba, la citaron en el IMSS pero la reprogramaron para el lunes por que no hay lo necesario.
"El punto de contagio no me queda claro donde fue, si en el trabajo, en mis visitas a los centros médicos, yo soy un ser de luz y sé que de esta vamos a salir".
CALE