La ola de contagios por la variante ómicron u otras enfermedades respiratorias, ha provocado que los niveles de ausentismo laboral en las empresas, se presente desde un 4% hasta alcanzar el 30%; así lo reportan organismos como la Cámara de Comercio y Canacintra. El personal afectado va desde el operativo hasta el administrativo.
Mariano Serna Muñoz, presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Torreón, recordó que ya con dos años luchando contra este virus, les ha ido enseñando muchas cosas, sin embargo, enfrentarse ahora a la variante ómicron sí les agarró desprevenidos.
“Al incrementarse la ola de contagios la gente comenzó a regresar a sus casas, las medidas de control y prevención se intensificaron, y mermó en las ventas, que cayeron hasta 30%, ventas que han venido cayendo desde la segunda semana de enero”, reconoció.
Dijo que han habido trabajadores que se infectaron del virus, que solo era gripa o que convivieron con gente contagiada, provocó el ausentismo.
En la industria hasta del 4%
La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), indica que se han estado realizando encuestas con las empresas afiliadas para conocer entre otros detalles, el dato del ausentismo laboral.
Al respecto, Carlos González Silva, presidente de este organismo industrial, explicó que en el personal que está directamente trabajando en las líneas de producción, el ausentismo alcanza el 5%; mientras que en el personal que se ubica en las áreas administrativas, va en 4% de ausentismo.
“En la industria somos muy exigentes con los protocolos, pero nos hemos dado cuenta que el contagio no es al interior, sino que ya directamente en las casas, en donde los trabajadores privilegian la convivencia social dentro y fuera del hogar y ahí bajan la guardia en los protocolos”.
Los porcentajes que manejó González Silva, precisó que si bien no es significativo de forma en que se paralicen actividades o las líneas de operación, si baja la eficiencia productiva.
“Impacta sobre todo en las micros y pequeñas empresas, donde si falta un trabajador, si hay un desequilibro en la vulnerabilidad de las operaciones de las empresas”.
aarp