Cuauhtémoc Blanco Bravo, gobernador de Morelos, entregó un nuevo pozo de agua potable, en la localidad de Coaxitlán, en el municipio de Tlaquiltenango, en la que se invirtieron más de cuatro millones de pesos para lograr que el líquido llegue a los más de mil habitantes.
El jefe del Ejecutivo estatal puntualizó que es la primera vez que asiste un gobernador a esta comunidad asentada en los límites con Guerrero; y se comprometió a seguir velando por el bienestar de la población que más lo necesita.
“Vamos a trabajar de la mano, no podemos permitir que la gente más humilde esté olvidada; yo me comprometo aquí a ayudar a su comunidad, cuenten conmigo”, afirmó.
Con la apertura de esta válvula, Blanco Bravo oficialmente dio inicio al funcionamiento de este pozo que constó de una perforación de 120 metros de profundidad, el equipamiento electromecánico, la colocación de un transformador eléctrico, y de manera adicional, la instalación de 490 metros de líneas de conducción, con un aforo de 1.75 litros por segundo.
El ayudante municipal, Juan Felipe Montes Alvarado, a nombre de los beneficiados, agradeció la visita del gobernador por su interés de asistir a conocer la comunidad para entregarles la obra; y solicitó nuevamente el apoyo para la construcción de una techumbre para la escuela primaria.
“Cuenta con eso para que los chavos no estén a la intemperie, yo te voy a ayudar para que tu gente esté bien y si me pides juegos, porque creo que les falta mucho, con mucho gusto”, respondió Blanco.
Jaime Juárez López, titular de la Comisión Estatal del Agua (Ceagua), señaló que tal como lo instruyó el mandatario morelense, se seguirán ejerciendo acciones en materia de infraestructura hídrica, debido a los rezagos considerables en toda la entidad, pues se encontraron obras inconclusas e instalaciones deterioradas al borde del colapso.
FMU