Desalojo de opositores a NAICM termina en riña

Trabajadores de las contructoras de la autopista Pirámides-Texcoco desalojaron a los campesinos de Texcoco y San Salvador Atenco, que mantenían un pantón para evitar la construcción de la vía. 

Un grupo resguardaba la maquinaria en la ruta Pirámides-Texcoco.
Heriberto Santos
Texcoco /

Trabajadores de las empresas constructoras de la autopista Pirámides-Texcoco, que comunicará al Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, desalojaron a los campesinos de los municipios de Texcoco y San Salvador Atenco, Estado de México, que desde hace cuatro meses mantenían un plantón en el ejido de San Miguel Tocuila para impedir la construcción de dicha carretera.

Durante el desalojo, ambos grupos se enfrentaron a pedradas, por lo que varias personas resultaron con golpes leves, incluso algunos reporteros fueron agredidos por el grupo que desmanteló y quemó el campamento que los ejidatarios instalaron en abril.

La mañana del viernes, unos 100 agresores, en su mayoría jóvenes, arribaron al ejido de Tocuila para resguardar el ingreso de la maquinaria de las empresas Lince y Cipsa Vise, encargadas de la construcción de la autopista, y reiniciar los trabajos de edificación de la vialidad que fueron suspendidos el pasado mes de abril.

Los jóvenes se dirigieron al plantón de los campesinos, que un día antes intentaron desmantelar, y arremetieron contra los opositores, entre ellos algunos integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco, quienes darían una conferencia a representantes de los medios de comunicación.

Por varios minutos ambos grupos se lanzaron pedradas hasta que los opositores lograron repeler a los jóvenes, pero éstos se reagruparon y se suscitó un segundo enfrentamiento. Ambos grupos se replegaron, los golpeadores hacia la autopista Peñón-Texcoco y los campesinos a su campamento.

Una hora y media después, al filo de las 13:30 horas, un número mayor de jóvenes ingresaron nuevamente al ejido; cuando el grupo de los golpeadores ingresó nuevamente al ejido y se apoderaron del campamento, lo destrozaron y lo quemaron.

Los jóvenes agredieron a fotógrafos y reporteros de diversos medios, a quienes corretearon, apedrearon y despojaron de equipos y celulares para impedir que tomaran fotografías del conflicto.

Los campesinos huyeron al centro del poblado para evitar más enfrentamientos, mientras que dos trascabos y decenas de camiones de volteo ingresaron y reiniciaron los trabajos de cimentación del terreno para la autopista.

Ninguna autoridad policiaca o de gobierno intervino para evitar el conflicto, solo una patrulla de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana permaneció estacionada en la autopista Peñon-Texcoco.

Los campesinos denunciaron que esta acción viola el amparo número 349-2016-II que les otorgó el juez noveno de distrito, Jorge Cristóbal Arrendondo Gallegos, el pasado 12 de abril y ratificó hace unos días para evitar que sean despojados de sus tierras para la construcción de la autopista.

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