De manera histórica, el 6 de enero representó para el personal de enfermería un reconocimiento a su labor en México. Hoy es un día de lucha y resistencia contra el covid-19 que mantiene en jaque al sistema de salud.
Según la Secretaría de Salud en Coahuila, desde el inicio de la pandemia hay 3 mil 368 profesionales de esa rama infectados y 22 fallecidos. La cifra es relevante si consideramos que refleja la mitad de los contagios entre el personal de salud en la entidad y poco más de la tercera parte de las defunciones.
Ana Cristina Flores Zurita, enfermera general asignada al área covid dentro de la clínica 71 del Seguro Social, afirma que el último año los marcó desde lo emocional hasta lo social. Hay un respiro por el número de pacientes que reciben, aunque están nerviosos por lo que viene.
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“Estos últimos dos meses dimos todo para terminar el año bien. Afortunadamente ahorita tenemos pocos pacientes, estamos recibiendo cinco o seis diarios cuando antes eran hasta 26, aunque nosotros sabemos que hablando de salud tampoco es tan bueno porque se estima un rebrote en enero y febrero”.
Considera que si bien el 6 de enero ha representado a lo largo de los años una celebración para muchos, ahora no es tal por la falta de sus colegas que dieron su vida por curar a los enfermos con el covid-19.
“Ha sido difícil porque nosotros entre el personal de salud sabemos que nos faltan compañeros y 2020 fue un año caótico en muchos sentidos. Nos faltan desde personal de limpieza hasta médicos y enfermeros, son compañeros que no están porque lamentablemente no pudieron salir adelante con el covid”.
Sin embargo, para ella el premio mayor en estos tiempos es poder ver a alguien salir adelante de la enfermedad, principalmente si tenía un diagnóstico nada favorable.
“En mi caso fue un paciente de 96 años dado de alta luego de mes y medio. Tenía pocas probabilidades de salir y saber que regresó con su esposa, sus hijos, nietos y bisnietos, es el mejor premio porque a nosotros nos puede mucho cuando alguien no regresa a su casa”.
Falta de personal en el sector salud
De acuerdo a las cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es uno de los países con el menor índice de profesionales de enfermería por cada mil habitantes con 2.5 y lo recomendable son 8.8.
En el caso de Coahuila hay 2.8 y en Torreón 3.6 trabajadores de esa rama de la salud, lo cual es explicable ante el mayor número de hospitales que en otras entidades y ciudades.
Luis Alfredo Medina, investigador del Observatorio Ciudadano de La Laguna, refiere que las condiciones en que laboran muchos profesionales de salud, principalmente en el área de enfermería, son precarias y las nuevas contrataciones carecen de las prestaciones necesarias.
“Las condiciones en que están laborando siguen siendo muy difíciles y hay que recordar que el sector salud tiene demasiadas privaciones en cuanto al uso de recursos públicos. Los nuevos trabajadores que se incorporan lo hacen sin prestaciones, al menos en el ámbito privado donde son contratos de un año y en el sector público vemos una sobrecarga de funciones”.
Destaca que a casi un año del inicio de la pandemia debe existir una reflexión profunda en torno a los presupuestos y recursos que el sector salud tiene, pues durante varios meses se notó la carencia del equipo mínimo indispensable para que el personal de salud estuviera protegido y eso derivó en muchos contagios.
“Más allá del discurso, el desayuno y las preseas que se otorgan en esta fecha, tenemos que hablar de presupuestos, así como acabar con la corrupción que hay dentro del sector salud”.
En cuanto al número de egresados de esa profesión, la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), establece que al corte del pasado ciclo escolar había 936 estudiantes en Torreón y egresaron 148.
Cambió la dinámica en estudiantes
La pandemia por el coronavirus cambió la dinámica formativa de todos los estudiantes en el mundo, pero tiene un acentuación más compleja en los que cursan una carrera vinculada a la salud.
Francisco Javier López Rincón, director de la Escuela de Enfermería de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC) Unidad Torreón, explica que es más difícil al tomar en cuenta que se requieren conocimientos tanto teóricos como prácticos desde el segundo semestre.
“Lo que están haciendo los maestros de la escuela es grabarles videos de las técnicas y procedimientos que deben practicar y les piden que ellos a la vez manden uno donde replican estos procedimientos para verificar cómo se lleva el aprendizaje, aunque sobra decir que nunca se va comparar con hacerlo con un paciente”.
Indica que pese a eso hay inquietud entre el alumnado para acudir a los centros hospitalarios y al no darse hay un desencanto entre algunos que cursan la carrera.
“El índice de deserción ha crecido en comparación con años pasados, aunque siempre se da entre primero y segundo semestre porque piensan que va ser una carrera fácil. El año pasado desertaron seis y por lo regular son un promedio de tres o cuatro de los 100 que ingresan”.
Refiere que la pandemia también hizo que la institución abriera para este semestre una nueva especialidad en cuidados intensivos.
“Hay una necesidad expresada en los hospitales y justamente donde está el paciente covid”.
López Rincón dice que durante el 2020 la demanda de personal de enfermería por parte del sector salud creció y, a través del sindicato de la Secretaría de Salud, les solicitaron apoyo para enviar recién egresados para atender en las áreas de atención al nuevo coronavirus.
“Ahorita nosotros hemos tenido contacto con el sindicato de la Secretaría de Salud donde sí nos hablan de que necesitan una enfermera con ciertas características, preferentemente ahorita por el covid. Nosotros hemos canalizado alrededor de 15 personas”.
AARP