La Fiscalía General del Estado de Michoacán obtuvo una sentencia de 50 años de prisión en contra de Diego Urik, asesino material e intelectual de la joven Jessica González Villaseñor, delito que cometió el 21 de septiembre de 2020.
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La audiencia para individualizar la pena tuvo lugar este miércoles en una sala del Poder Judicial, donde el hombre de 21 años escuchó la decisión del juez Ariel Montoya Romero, quien dijo haber encontrado los elementos suficientes para dar la máxima pena contemplada por el Código Penal de Michoacán en su artículo 120.
Para el juez hubo dolo, saña, crueldad y nulo arrepentimiento en este crimen cometido en una zona boscosa de Morelia, donde la joven maestra fue encontrada con 31 golpes y signos de violación sexual.
A cuatro días de su desaparición el cuerpo fue encontrado entre los árboles cercanos a un lujoso fraccionamiento donde vivía Diego Urik, quien huyó al estado de Jalisco pero fue detenido pocos días después.
Desde entonces comenzó un largo proceso que incluyó decenas de audiencias, la presentación de más de 100 pruebas y muchos testigos, entre ellos ex amigos de Urik, quienes declararon en su contra.
También se determinó que el acusado deberá pagar un millón 246 mil pesos por reparación económica del daño, calculado con base en el salario que como maestra se le había asignado a Jessica González.
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