Ubicado en el municipio de Mapimí, Durango, el Puente de Ojuela fue construido en 1892 para la transportación de minerales. Hoy en día se ha convertido en un atractivo turístico pues ofrece un recorrido al interior de la mina, además de ofrecer deportes extremos como tirolesa, rapel y senderismo.
La única forma de poder ingresar al puente es en auto y el recorrido comienza al tener que transitar siete kilómetros, de los cuales tres de ellos son de terracería y el resto de un camino empedrado donde solo hay espacio para un vehículo.
José Ángel Ramírez, quien es guía certificado y con más de 20 años de experiencia en este viaje, fue el encargado de brindar todo un tour del lugar.
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El impresionante puente, tiene una longitud de más de 315 metros de largo y una altitud de más de 100 metros de altura. El poder cruzarlo es toda una experiencia llena de adrenalina al estar en medio del acantilado.
Ya en el otro extremo el poder recorrer la mina con una extensión de 800 metros lineales, te permite conocer todo tipo de minerales que existen al interior del lugar, además de contar con un pequeño museo en su interior.
El recorrido de la mina solo te llevará un tiempo estimado de 45 minutos, además de ofrecer área de recreación donde las familias podrán realizar su comida al contar con área de asador, sanitarios, una pequeña fonda además de artesanías del lugar.
Para los jóvenes amantes de las emociones fuertes podrán vivir la experiencia de lanzarse de una de las cuatro tirolesas con la que cuenta el lugar.
Hoy en día por la contingencia, los recorridos se han limitado a grupos familiares para un mejor control.
Horario de apertura
El Puente de Ojuela el cual se encuentra abierto los siete días de la semana, los 365 días del año, en horario de 10:00 de la mañana a 5:00 de la tarde, es una buena opción para disfrutar en familia del recorrido ya que el acceso es de tan solo 120 pesos por persona.
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