En La Laguna de Durango existen alrededor de 70 centros de rehabilitación, distribuidos en Gómez Palacio y Lerdo principalmente, mientras que Nazas y Peñón Blanco cuentan con uno.
Sin embargo, de esa cantidad sólo 32 están registrados, de los cuales se realizan visitas nada más en 28, debido a la falta de personal.
Jesús Rentería Maldonado, responsable de la oficina regional de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Durango (Coprised), con jurisdicción en 12 municipios de la Comarca Lagunera, informó que realmente muchos funcionan sin las condiciones óptimas en sus instalaciones, algunos están sobrepoblados y en sus visitas los inspectores hacen los señalamientos para mejoras. Tienen la orden de no clausurar pero sí de vigilar que cumplan con los requerimientos.
“Cuando los verificadores andan en sus tareas en el campo, les encargamos que hagan censo de los establecimientos de este tipo nuevos, ya que son un negocio pero por su característica deben de cumplir con varios requisitos, como contar con un médico, un psicólogo, psiquiatra en muchos de los casos y hasta un nutriólogo, pero no sucede así”, señaló.
Señaló que la población que es adicta va creciendo y cada vez se registran con más frecuencia anexos con sobrecupo, ya que no cuentan con instalaciones adecuadas pues son casas que van acondicionando.
Expuso que la semana pasada visitaron uno de esos centros instalado en Lerdo, Durango, donde hay 39 usuarios, entre hombres y mujeres, pero sólo cuenta con 11 camas.
Manifestó que por falta de personal la oficina a su cargo no puede abarcar más y desconoce si en el resto de los ocho municipios existan anexos.
“Tendríamos que hacer una visita al menos en las cabeceras municipales, pero el servicio de verificación o de salud apenas lo estamos formando para acudir a verificar la cuestión de la infraestructura de esos lugares, el cableado eléctrico, tinacos, número de sanitarios, que haya camas suficientes, que tengan extinguidores, agua para consumo humano, y otros puntos importantes”, indicó
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¿A dónde acudir si un familiar tiene problemas de adicciones?
Por su parte, Alejandra Torres Arciniega, titular de la Comisión Estatal para la Prevención y Asistencia de las Adicciones en Durango (Cepaad), dependiente de la Secretaría de Salud, recomendó que antes de que la familia de un consumidor de drogas o alcohol tome la decisión de ingresarlo en algún sitio para tratamiento de la adicción, es fundamental acudir a un Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA).
En estos centros, el personal especializado determinará si es necesario el internamiento, porque en la mayoría de las ocasiones, con tratamientos ambulatorios estas personas pueden salir adelante, ya que es donde se hace una valoración especializada al posible consumidor de sustancias adictivas, pues la mayoría de los centros que operan en Durango no cumplen con la normatividad, tan sólo en la Capital, nada más siete de los 49 existentes son reconocidos por Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic).
Reconoció que se pone en riesgo la salud de quienes llegan a centros que trabajan irregularmente, dado que carecen de personal médico y especialistas.
Se debe llevar a cabo solamente cuando un profesional certificado por la Secretaría de Salud recomiende el internamiento, pero deberá ser en un lugar que cumpla con todos los requisitos para su funcionamiento.
En el estado existen cuatro CAPA, uno de ellos se ubica en Gómez Palacio, que es el Uneme CAPA de la colonia Filadelfia, dado que lo primero es escuchar a un especialista para que valore clínicamente al paciente y se le brinde asesoría respecto a los pasos que deberán seguirse.
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