La iglesia católica se aplica a las disposiciones establecidas por el Comité Estatal de Salud y ha reducido a un 50 por ciento los aforos de feligreses a las misas ordinarias como de fines de semana, a fin de prevenir los contagios de ómicron que mantiene al estado de Durango en semáforo naranja.
Lo anterior fue señalado por el párroco Luis Martín Lugo Cervantes, de la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe de Lerdo, quien refirió que a partir de la pandemia la gente se ha vuelto más asidua a acudir a las parroquias ubicadas tanto en la zona urbana como rural, ya sea para pedir por sus familiares y amigos contagiados como a agradecer que les haya recuperado la salud.
Precisó que nada menos en las fiestas patronales del pasado 12 de diciembre se observó un mayor número de creyentes que acudieron a este recinto religioso, incluso más que antes de iniciar la pandemia en marzo del 2020, fecha en que los festejos quedaron suspendidos por protocolos sanitarios.
“Lo que fue por la experiencia del año pasado, en las fiestas patronales, fueron muchas muestras de gratitud por haber salido de la crisis que llegó a muchas familias al tener parientes muy malitos o incluso hospitalizados y en ese sentido Lerdo se sigue distinguiendo por ser una ciudad netamente guadalupana”, dijo.
Comentó que entre semanas sí se presentan visitas a la parroquia, pero al estar ahora en semáforo naranja, pues las restricciones se aplican sin distingo y el aforo se ha reducido hasta en un 50 por ciento de la capacidad de los asientos al interior de los templos, además de que la gente por sí misma se está cuidando respetando todos los protocolos como es la sana distancia, el uso obligado de cubrebocas y la aplicación de gel antibacterial.
A partir de las medidas adoptadas por el gobierno del estado en concordancia con el gobierno municipal, se llegó la notificación a través de Protección Civil para reducir los aforos hasta un 50 por ciento en todas las misas.
Dijo que son un gran número de parroquias que tiene Lerdo, pues tan sólo en la zona urbana están la suya que es la Nuestra Señora de Guadalupe, del Sagrado Corazón, Nuestra Señora del Refugio en la colonia 20 de Noviembre, la parroquia de la Inmaculada Concepción en la colonia César G. Meraz, así como la parroquia de Santa Rita en la colonia La Viña, además de la capilla de San Antonio de Padua.
Dijo que cada parroquia tiene sus comunidades rurales que atender, por lo que llamó a la población a seguir adoptando las medidas que desde hace casi dos años se han mantenido para prevenir los contagios y en los que se ha alcanzado ya la adaptabilidad a la nueva realidad en un afán de conservar los protocolos y con esto protegernos como sociedad.
EGO