¿Quién se robó el río? ¿A dónde se llevaron el agua? Si el agua está encerrada, ¿el agua es de alguien, era malo que caminara? Estas y otras preguntas se dejan escuchar en las voces de los niños cada vez que pasean por el vado; sea un paisaje violentamente caliente y gris que divide a ciudades de Durango y Coahuila, o cuando las presas llegan a su nivel máximo y son desfogadas, recobrando la estampa de una región con vida y frescor.
Ellos plantean una inocente verdad que pone en la mesa una decisión política que ha hecho estragos al medio ambiente al impedir que el agua del río Nazas siga su cauce, desecando el paisaje, rompiendo ecosistemas y poniendo en riesgo el acuífero principal de la Comarca Lagunera.
Bajo ese contexto y para hacer que la mirada de los ciudadanos y gobernantes vuelva a un espacio aparentemente yerto, activistas y defensores del medio ambiente han programado una actividad lúdica que se llama “Picnic: ¡Que vuelva el Nazas!”, que se realizará el próximo 4 de febrero a partir de las diez de la mañana en el llamado Metroparque Nazas, en el bulevar Río Nazas, lecho seco, cerca del puente plateado, casi frente a la cruz monumental.
La organización civil convocante es Prodenazas A.C. en el marco del Día Mundial de los Humedales que se conmemora cada 2 de febrero, y que justamente impulsa la idea global de la restauración de los cauces naturales. De manera el mismo día se anunciará el inicio de un movimiento denominado Nazas Vivo. El doctor en ciencias y defensor del medio ambiente, Francisco Valdés Pérezgasga explicó:
“Es una especie de provocación el hacer un picnic en el lecho seco del río. Digamos que es un asunto lúdico pero también reivindicativo porque lo que estamos pidiendo en verdad, lo que queremos, es que vuelva el río. El nombre del Picnic es “Que vuelva el Nazas”, de lo que se trata es de hacer un picnic como si fuéramos al Cañón de Fernández pero en el lecho seco, como una especie de reafirmación de que eso es un río y que tiene que volver a ser un río”.
El objetivo que se persigue al solicitarle a las autoridades que se deje correr el agua del río Nazas por su cauce es claro y los activistas establecen que es necesaria la recarga de los mantos acuíferos además de que con ello se reforestarían los márgenes del río cambiando el microclima.
De ser aceptada esta propuesta, con el paso del agua cambiaría además la mentalidad colectiva sobre la preservación de los ecosistemas, reportando como un beneficio extra el cambio climático pero también el cambio de ánimo de los Laguneros que en las generaciones más jóvenes no saben por qué se les denomina así en una región que se muere de sed.
“Se trata de festejar a nuestro río, el cadáver en que hemos convertido nuestro río, pero soñando en que vuelva a ser lo que un día fue. También queremos aprovechar el picnic para anunciar el inicio un movimiento que se llamará Nazas Vivo, en donde hacemos un llamado a toda la población, sobre todo a la gente joven, que es la que va a vivir en el futuro, a que pensemos, soñemos, veamos un futuro para nuestra Comarca Lagunera que solamente será posible con un río vivo. Con un Nazas vivo”, explicó Francisco Valdés Pérezgasga.
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