A poco más de un mes de haber entrado en vigor el nuevo sistema de parquímetros en Lerdo a través de una aplicación digital, las estructuras de lo que fueron los monederos han tenido una utilidad nada grata, pues la gente los usa de basureros ofreciendo una mala imagen en el primer cuadro.
En un recorrido hecho por MILENIO se aprecia que estos depósitos que un día sirvieron de base y para captar las monedas que los usuarios depositaban para garantizar su estacionamiento, ahora lastimosamente son recipientes de bolsas con residuos de frituras, vasos de plástico, botellas de plástico pet y otros desechos.
Localizados en algún punto de las manzanas que son parte del mal llamado Centro Histórico de Lerdo, Durango, dichas bases de metal sirven de basureros donde los transeúntes sin ningún recato, ni responsabilidad tiran a lo fácil lo que les viene en gana y que traen en la mano.
Fue hace menos de un mes que se puso en operación el nuevo sistema de cobro de los estacionómetros en el primer cuadro de la ciudad, dejando a un lado las estructuras que sirvieron de monederos y de base para el sistema de cobro, instaladas estas sobre banquetas de las manzanas que rodean a la plaza principal y al Palacio Municipal.
Terminaron su vida útil
Cabe recordar que dicho esquema de estacionómetros fue concesionado en el 2013 a una empresa particular y sus equipos estaban por cumplir diez años de servicio y cuyos ingresos han servido una parte a becas y recientemente a la compra de aparatos funcionales para personas con discapacidad.
Sin embargo, el retiro de esos equipos no dejó muchos positivos cuando al quedar expuestos los monederos, estos de inmediato tuvieron una utilidad para la gente: usarlos de botes de basura, mientras que la infraestructura que se para ello se tiene en los diversos puntos de la ciudad son ignorados.
¿Dónde están esos parquímetros?
Así están al menos aquellos depósitos que se tienen en la avenida Sarabia entre Hidalgo y Coronado, a unos pasos de la Presidencia Municipal; al igual que uno más en la calle Allende entre Francisco I. Madero y Matamoros, lo mismo que en otro más instalado en calle Guerrero entre Sarabia y Coronado a un lado de un lavado de autos, pues lucen rebosantes de basura.
Colocan letreros
En otros más los vecinos o comercios donde quedó dicha estructura les ha colocado bolsas de plástico para impedir que tengan esa utilidad que sólo propicia moscas y un nido de asqueles como se tiene en el ubicado en Allende entre Coronado y Sarabia afuera precisamente de la oficina de Parquímetros.
En tanto que en otros casos de plano se les colocó leyendas para evitar que estos sean usados como depósitos de basura, como una manera de inhibir la falta de educación o cultura ambiental, como el que se tiene en la calle Hidalgo entre Francisco I. Madero y Matamoros a un lado precisamente de una tienda de electrónica.
De esta manera, el exhorto es claro para la empresa concesionaria a fin de que si bien se aplaude el uso de herramientas digitales para el cobro de sus servicios, lo mínimo que debería hacer es el retiro absoluto de esa chatarra o al menos que si quiere transformarlas, que las habilite de macetas y coloque algunos arbustos o rosales.
EGO