La Secretaría de la Defensa Nacional ordenó el arribo de 900 soldados adicionales al estado de Michoacán para el combate al crimen organizado ante la ola de violencia que se a registrado en la entidad.
En menos de 15 días, el Ejército mexicano envió 2 mil soldados para restablecer la paz social, con varios objetivos designados en la región de la Tierra Caliente.
Los 900 elementos del Ejército mexicano llevan por objetivo fortalecer las operaciones de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública y de la política de cero impunidad del gobierno federal que mantiene el Ejército y la Guardia Nacional en la entidad.
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Referido efectivo actuará en coordinación con las autoridades de los tres órdenes de gobierno (federal, estatal y municipal) a fin de localizar a los responsables de los generadores de violencia, implementado acciones contundentes, para impedir delitos y disuadir las conductas que ponen en riesgo a la sociedad.
Comunicación oficial reveló que esta fuerza de seguridad en Michoacán cuenta con gran capacidad de despliegue, equipo y adiestramiento especializado para realizar operaciones interinstitucionales.
Igualmente, reafirmaron que el Ejército actúa en todo momento respetando en todo momento los derechos humanos de las personas.
Violencia en Michoacán
Sólo el día de hoy, MILENIO reportó un supuesto ataque con drones en la en las comunidades de El Tesorero, mejor conocida como Altamira, y de Chiquihuitillo, al norte de la región de Tierra Caliente, que dejaron explosiones en una cancha ejidal y viviendas.
Pese a la evidencia de las aeronaves no tripuladas, no se reportaron personas heridas.
Según narran miembros de la comunidad, los ataques se deben a una disputa entre grupos delincuenciales antagónicos por la plaza en la que ya existe presencia de elementos de seguridad federal y estatal.
Estas localidades, junto con Lomas de Los Hoyos, Puerta de Alambre, Las Bateas y El Guayabo, principalmente, han sido de las más atacadas bajo este nuevo esquema de violencia.
aag