El 60% del total de casos de menores maltratados en Coahuila, están relacionados con la omisión de cuidados.
La Procuradura de los Niños, Niñas y Familia (PRONNIF), Yezka Garza, comentó que se considera omisión de cuidados cuando se acredita un grado de desnutrición, aunque sea el más bajo, así como problemas de deserción escolar, cuando no se les ha garantizado su derecho a la entidad, que lo tienen atención médica.
“Hemos tenido casos en los que nos llegan niños de 11 o 12 años que no cuentan con registro de nacimiento, hay casos que nos reporta el hospital del niño o algún centro de salud del IMSS, en los que los menores no fueron llevados de manera inmediata a recibir atención médica, a eso nos referimos con la omisión de cuidados”, expuso.
Indicó que dependiendo del grado de omisión de cuidados que se dictamine, es la medida que se impone para la protección de los derechos de los niños, en todo los casos precisó, se hace un apercibimiento, en casos muy graves hay una separación inmediata de los menores y se inicia un proceso de la pérdida de la patria potestad.
“En casos de separación inmediata buscamos a la familia de apoyo, hacemos un convenio con la familia de apoyo, la institución y con los padres para regularizar el tema de guarda y custodia, donde los padres tiene que contribuir a una pensión alimenticia y que se les garantice su derecho a vivir en convivencia”, detalló.
“Si es reiterada o crónica, o que la omisión de cuidados puso en peligro la vida o la integridad física si se impone una medida de separación, donde llegamos a una institucionalización, incluso si se llega a un tema grave podemos llegar a un juicio de pérdida de patria potestad”, agregó.