Al principio se consideraban charlatanería. Corrían los años 90 y los primeros de este siglo y la gran mayoría de médicos especialistas denostaban todo aquel tratamiento que prometía quitar las arrugas del rostro, que no fuera la cirugía plástica. Hoy las cosas han cambiado. Están en gran boga diversas técnicas que sustituyen al bisturí y hasta profesionales de la medicina los practican con buenos resultados.
Uno de los pioneros en la investigación de tratamientos no quirúrgicos para el rejuvenecimiento facial, Julio Manuel Barba Gómez, médico del Instituto Dermatológico de Jalisco y reconocido especialista, asegura que el anhelo por mantener una apariencia más joven no es nuevo. Por el contrario, es intrínseco al ser humano y hay evidencia de “tratamientos” para rejuvenecer desde el antiguo Egipto, donde ya se practicaban abrasiones con arena y uso leche de cabra o burra (que contiene ácido láctico) para alisar la piel.
Más de dos milenios después, se han multiplicado las clínicas de cosmética y también los centros médicos que ofrecen diversos tratamientos no quirúrgicos para rejuvenecer. Barba Gómez resume su éxito:
“Han tenido mucho auge porque la gente busca menos incapacidad. Incapacitan mucho menos que la cirugía… una microdermoabrasión no te va a dar ninguna una incapacidad; o el que te sometas a radiofrecuencia, que ayuda a estimulación de fibras elásticas y de colágeno, tampoco te va a dejar ninguna secuela: la piel no queda roja, no se despelleja, no saca de circulación, no inflama. Son tratamientos alternativos para rejuvenecimiento, no invasivos”.
Existen otros que sí son ligeramente invasivos, pues exigen introducir una aguja a través de la piel para aplicar sustancias químicas como toxina botulínica o ácido hialurónico, o bien la propia grasa del cuerpo con diversos fines. Ciertamente, también hay los que producen efectos secundarios y sí exigen una incapacidad, como el peeling profundo, que de acuerdo con el entrevistado permite “rejuvenecer quince años”, pero saca al paciente de circulación mínimo diez días y el rostro queda enrojecido por unos tres meses. Pasado este lapso se adquiere el tono de la piel normal, aseguró.
De acuerdo con Barba Gómez, otra ventaja de los tratamientos no quirúrgicos es que no transforma la apariencia tanto como lo puede hacer una cirugía plástica, la cual estira, ajusta y corta los tejidos para tensarlos internamente y de esa manera rejuvenecer. “La cirugía despersonaliza en ocasiones”, advirtió.
Unos de los primeros tratamientos no quirúrgicos es el uso de toxina botulínica, la cual paraliza los músculos seleccionados por un tiempo limitado: de tres a seis meses. Julio Barba Gómez fue el primero en Guadalajara en aplicarla. Este proceso requiere de inyecciones en puntos específicos que, indicó, no son dolorosas.
“Yo con eso puedo elevar tu ceja, quitar las patitas de gallo, disminuir las líneas de expresión alrededor de la boca o ‘código de barras’ que se le llama; puedo hacer que la punta nasal se eleve, que la sonrisa de estar caída se levante; que en el ‘cuello de Nefertiti’ se borren las dos bandas, las dos arrugas que se forman en el cuello. Todo eso nos puede ayudar por la parte estética”, sostuvo.
En cuanto a los peeling, que es la utilización de sustancias químicas sobre la piel con el objetivo de renovar las células, el especialista explicó que pueden ser superficiales, medios o profundos. Para el primer grado hay cremas de libre venta que la persona aplica en su casa para desvanecer arrugas. Contienen algunas sustancias como ácido hialurónico, ácido salicílico o ácido retinóico. Es un peeling casero, y su efecto se ve al cabo de varias semanas.
El peeling medio lo hacen cosmetólogas o médicos especialistas. “Es una quemadura controlada, superficial, que puede ser con ácido, puede ser mecánica, la microdermoabrasión, o puede ser física: con láser o nitrógeno líquido.
La microdermoabrasión se realiza con arena de óxido de aluminio o con una fresa de diamante para retirar las capas superficiales de la piel, la queratina y parte de la epidermis. Con esta técnica se puede obtener mayor lozanía en la piel, desaparecer manchas pequeñas o de sol, dijo.
El peeling profundo es el que ofrece un rejuvenecimiento mayor. Sin embargo, requiere sedación o anestesia general, se realiza en quirófano y sólo lo debe practicar un médico con experiencia, porque su mal manejo puede dejar cicatrices, a veces con formación queloide, manchas y otros problemas que pueden ser irreversibles. De ahí que insistió a los interesados buscar profesionales. “Ir con la persona que tenga la capacidad y la experiencia para hacer esto, un dermatólogo o un cirujano plástico-estético”.
La radiofrecuencia
Una de las técnicas más buscadas, consiste en radiaciones electromagnéticas que oscilan simultáneamente en el campo eléctrico y magnético y desde hace años era empleadas en cirugías, pero sin duda su mayor uso hoy es en el campo de la estética. La radiofrecuencia genera un campo eléctrico que cambia de positivo a negativo, lo que causa un movimiento rotacional de las moléculas que genera calor y permite llegar a la dermis profunda y capas subdermicas mientras se protege la epidermis para combatir arrugas y flacidez de la piel.
También está la tecnología láser para remover las capas de la piel con el mismo fin.
Con tantas alternativas puede costar qué elegir. Todo dependerá del bolsillo y el fin que se persiga, pero el especialista considera que son una buena opción. “La combinación de varios procedimientos no quirúrgicos podrán dar el resultado de un procedimiento agresivo, de una cirugía plástica", agregó. Y eso resulta una gran motivación para muchas personas.
Claves
Para rejuvenecer
Toxina Botulínica (Tipo A)
Es la mayormente conocida e indicada para el tratamiento y prevención de líneas de expresión formadas por la mímica facial. La toxina botulínica es aplicada directamente en el músculo responsable de formar la arruga, es un procedimiento sencillo y rápido que no requiere de tiempo de recuperación, los resultados son naturales al relajar los músculos del rostro.
Ácido Hialurónico
Esta sustancia es la encargada de darle fuerza y firmeza a la piel, pero se pierde al paso del tiempo. Se recupera manera sintetizada para mejorar la humectación y reestructuración facial en arrugas marcadas. Se usas para ojeras, volumen en labios, simetría en pómulos, mentón, cuello y manos.
Peeling
Es la utilización de sustancias químicas sobre la piel con el objetivo de renovar las células. Pueden ser superficiales, medios o profundos.
Tecnología láser
Actúa mediante la remoción de capas superficiales de la piel. El resultado es la mejoría integral y notoria de la textura, disminución de líneas de expresión, flacidez, manchas, ventas rojas y cicatrices de acné.
Radiofrecuencia
Por medio de calor se estimula y fortalece el colágeno, reduce la grasa localizada, fortalece y da tensión a la piel flácida y reduce la celulitis. Se puede usar tanto en rostro como en cuerpo de forma segura.
Fuente: Dr. Julio Manuel Barba Gómez