El dirigente de la Confederación Campesina Independiente, Hugo Eduardo Guillen, anunció que habrá de solicitar ante el gobierno del estado como del municipio de Lerdo, la construcción de una represa, a través de la cual se puedan aprovechar los escurrimientos que puedan darse de las avenidas del río Aguanaval, pues bajo las condiciones actuales esa agua se desperdicia y se deja correr hasta Matamoros y Viesca en el lado de Coahuila.
Expuso que ciertamente bajo las condiciones climáticas actuales mucho se debe de hacer para aprovechar cuando se dan este tipo de fenómenos de lluvia o escurrimientos pluviales, a manera de que los ejidatarios de la zona del Valle de Nazareno puedan aprovechar esa humedad en el establecimiento de algún cultivo temporal.
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Hizo ver que las recientes lluvias no han sido suficientes para alzar “bandera blanca” en la terminación del largo periodo de sequía que se presenta en esta parte del estado de Durango como de Coahuila, por lo que aún falta mucho para recuperar los embalses de las presas y garantizar un ciclo de riego en el 2025.
De hecho, asegura que esta agua que cayó en días pasados habrá de ayudar mucho a los maíces que están sembrados en las zonas de riego, pues aún recibiendo agua de las presas, las altas temperaturas estaban estresando los cultivos.
A pregunta expresa, dijo que habría que atender las demandas de los campesinos del Valle de Nazareno, en el sentido de que hace falta construir una represa de aquel lado para que los escurrimientos del río Aguanaval, aún siendo pocos, puedan aprovecharse para sembrar cultivos de temporal que mucho ayudarían al autoconsumo o bien para forrajes para su ganado caprino.
“Es lo que falta allí, que haya una represa, para que capten esas aguas y que las aprovechen los campesinos de esta zona donde convergen varias comunidades aledañas como Picardías, Siete Libres y Nazareno, pero además están los de La Flor y Juan Eugenio en la parte de Coahuila, que son ejidos que no están dentro de la zona de riego y sólo dependen del temporal”, dijo.
“El problema de no hacerlo, dijo al finalizar, es que el agua se deja correr y los únicos que la aprovechan son los campesinos de la parte baja de Matamoros y Viesca”, refirió.
Recordó que antes se giraban oficios a la Ciudad de México ante instancias federales para ver la posibilidad de bajar algún recurso para la construcción de este tipo de obras hidráulicas, pero en lo que va del sexenio se han cancelado absolutamente todos los fondos y programas que tienen que ver con el campo, por lo que ahora la gestión tendrá que hacerse ante la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del gobierno estatal como ante el presidente municipal Homero Martínez.
aarp