Tras calificar como “dramática” la legada de cientos de migrantes centroamericanos a El Paso, Texas, el comisionado de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés), Kevin K. McAleenan, dijo que su dependencia se enfrenta a una crisis humanitaria y de seguridad fronteriza sin precedentes a lo largo de su frontera.
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Durante una conferencia de prensa que ofreció a un costado del muro que separa Texas de Ciudad Juárez, Chihuahua, el funcionario aseguró que en ninguna parte de la frontera de Estados Unidos se ha manifestado una crisis como en esta región, a la cual se enviarán 750 agentes para reforzar a la Patrulla Fronteriza.
“CBP se enfrenta a una crisis humanitaria y de seguridad fronteriza sin precedentes a lo largo de nuestra frontera suroeste. Aquí en El Paso, tenemos a casi 3 mil 500 migrantes en custodia en instalaciones diseñadas para mucho menos: tuvimos más de 1 mil aprehensiones el lunes. La gran mayoría son familias de Centroamérica.
“A nivel nacional, la CBP tuvo más de 12 mil migrantes en custodia esta semana. La agencia considera que 4 mil es un alto número de migrantes bajo custodia y 6 mil para estar en un nivel de crisis, y más de 12 mil migrantes en custodia no tienen precedentes”, resaltó.
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Al tiempo en que decenas de migrantes deambulaban por el bordo del territorio mexicano, K. McAleenan vaticinó que a consecuencia de esta crisis la CBP está en camino de realizar más de 100 mil aprehensiones para este mes, lo que sería el total mensual más alto registrado en una década .
Explicó que este aumento tiene un impacto perjudicial en la misión principal de seguridad fronteriza que realiza su dependencia, pues con un 40 por ciento o más del personal, la CBP está trabajando para cuidar, transportar y procesar familias y niños vulnerables.
“La postura de seguridad de CBP en la frontera se ve afectada negativamente: las mismas organizaciones criminales transnacionales y contrabandistas que explotan y se benefician de los migrantes, se benefician de esa presencia reducida de personal”, dijo.
Asimismo informó que diariamente se traslada a más de 60 migrantes al hospital, lo que se traduce en casi 100 mil horas de trabajo las que realizan los agentes de la Patrulla Fronteriza en esta materia, donde la CBP registra un número sin precedentes de migrantes con condiciones médicas graves.
Sostuvo que los controles médicos ampliados y los esfuerzos concertados del personal de la CBP están salvando vidas, pero a un alto costo para la misión que tienen los agentes, por lo que ahora, se están tomando una serie de pasos para enfrentar esta crisis migratoria.
Para ello, explicó el comisionado, se utilizarán los fondos adicionales proporcionados a su dependencia durante el presente año fiscal, para extender la contratación médica a sectores clave; aumentar los activos de aplicación de la ley con el apoyo de contrato para el cuidado de migrantes y servicios de alimentos; mejorar el transporte; y establecer nuevas instalaciones de procesamiento, incluido un centro planificado en esta frontera.
“Este cambio de recursos y personal tendrá un impacto perjudicial en todos los puertos de entrada de la frontera suroeste. CBP tendrá que cerrar carriles, lo que aumentará los tiempos de espera para los envíos comerciales y los viajeros. Hace dos semanas, testifiqué en el Congreso que nuestro sistema de inmigración estaba en un punto crítico. Ese punto de ruptura ha llegado esta semana a nuestra frontera”, indicó.
RLO